La vida y obra de Pablo Neruda desde una perspectiva poética, política y humana fue enaltecida hoy durante un homenaje en España, donde el Premio Nobel de Literatura despierta indescriptibles sentimientos de admiración.
Por iniciativa de la Fundación Internacional Baltasar Garzón, el sentido tributo al bardo chileno tuvo por escenario el salón de actos de la facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
Fue el propio presidente de esa fundación, el conocido jurista español Baltasar Garzón, el encargado de inaugurar las jornadas con motivo del 45 aniversario de la muerte de Neruda, ocurrida en Santiago de Chile el 23 de septiembre de 1973.
La España que él había amado, la que se desangraba por una Guerra Civil, pero también aquella que compartió con sus amigos de la Generación del 27 y la que nutrió tantos y tan bellos poemas y escritos, destacó el letrado sobre la intensa relación del vate con esta nación.
La noche de su muerte -rememoró-, Chile se vio inmerso en «una larga noche», y hoy, 45 años después, organizamos este acto por la memoria, la memoria de una historia difícil de la que Neruda también formó parte.
Cónsul en Barcelona y Madrid, fue amigo de Federico García Lorca y de Rafael Alberti y como ellos sufrió como este país se desangraba por la Guerra Civil (1936-1939) y la ulterior dictadura de Francisco Franco (1939-1975), enfatizó el exjuez de la Audiencia Nacional.
No solo su poesía fue comprometida, también su acción política, resaltó sobre el autor de Canto General, venerado por rescatar en 1939 a casi dos mil refugiados en el barco Winnipeg, que huían del régimen franquista, lo cual elevó todavía más la intachable trayectoria del escritor.
Nos interesa la búsqueda de la verdad, porque sobre la mentira las sociedades no se construyen, sino que se destruyen, subrayó el jurista en alusión a la posible muerte violenta de Neruda, acontecimientos bajo investigación.
A sus palabras se sumó el rector de la UCM, Carlos Andradas, quien describió al Nobel como una auténtica referencia en España.
Señaló que a todos concierne «involucrarnos en el conocimiento de la verdad» sobre las extrañas circunstancias que rodearon la desaparición física del hombre que estremeció a varias generaciones con sus Veinte Poemas de Amor y una Canción Desesperada.
A las pesquisas sobre el deceso de Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto (verdadero nombre de Neruda) se refirieron Rodolfo Reyes, abogado y sobrino del poeta; Elisabeth Flores y Rodrigo Lledó, todos ellos estrechamente vinculados a la investigación.
Las profesoras e investigadoras Evangelina Soltero y Fanny Rubio y el poeta Antonio Hernández comentaron, a través de historias y anécdotas, la estrecha relación de Neruda con esa España Republicana que tanta vida le dio y también le arrebató.
Como colofón del emotivo homenaje, una lectura de poemas del escritor, las actuaciones musicales de Santiago Pineda y Leo Zelada y la del popular cantautor Paco Ibáñez, que conoció a Neruda en París en 1970.
Nunca olvidaremos a Pablo Neruda, nunca olvidaremos su ejemplo, expresó el profesor José Manuel Lucía Mejías, para quien el mejor homenaje a un poeta es hacer que su poesía siga siendo parte de nuestro recuerdo.
Madrid, 21 de octubre 2018
Crónica Digital /PL