Otro hecho que llamó la atención, teniendo en cuenta las estadísticas del IBGE, fue el número de brasileños con una cartera firmada (con empleo), que se retiró al nivel más bajo de la serie histórica. Ahora, 32,2 millones de personas tienen un trabajo formal en Brasil.
El mercado laboral ya siente los impactos de la pandemia del coronavirus, que llevó al aislamiento social como un intento de contener la propagación del virus.
Según el instituto, la población ocupada se redujo en un 5,2 por ciento, un récord, en comparación con el trimestre que terminó en enero, lo cual representa una pérdida de 4,9 millones de puestos de trabajo que se redujeron a 89,2 millones.
Del total de 4,9 millones, 1,2 millones procedían del comercio, 885 mil de la construcción y 727 mil de los servicios domésticos.
Para Adriana Beringuy, analista de investigación, los datos pueden estar relacionados con medidas de confinamiento.
‘Varias familias pueden haber despedido a sus trabajadores domésticos por este problema de la cuarentena. Es una caída muy fuerte’, indicó.
Por otra parte, la tasa de informalidad fue del 38,8 por ciento de la población ocupada, lo que representa un contingente de 34,6 millones de trabajadores informales, el menor de la serie histórica iniciada en 2016.
El país registró el primer caso de coronavirus el 26 de febrero y en marzo se aplicaron las medidas de aislamiento en los 27 estados. Por tal motivo se espera que los efectos de la crisis afloren en el segundo trimestre del año.
Brasil registró 25 mil 598 muertes y contabilizó 411 mil 821 infectados del virus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19, según el último reporte del Ministerio de Salud.
Brasilia, 28 mayo 2020
Crónica Digital/PL