Expresidente español aboga por solución dialogada en Venezuela

El expresidente del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero rechazó hoy la vía de las sanciones como presión para resolver la situación política en Venezuela y apostó por una solución dialogada y pactada.

 

En opinión del otrora mandatario (2004-2011), que en los últimos años lideró la mediación internacional a favor de un acuerdo entre el Gobierno y la oposición de la República Bolivariana, la única salida posible en el país sudamericano pasa por la negociación.

Zapatero se pronunció en esos términos durante una intervención en el Foro Nueva Economía, en la cual se mostró convencido de que la única solución posible para Venezuela pasa, ‘más que por la sanción, por la seducción, el diálogo sincero y el acuerdo real’.

Una idea que, según su criterio, es posible siempre y cuando no se plantee como un programa para eliminar a una de las partes implicadas.

A su juicio, la comunidad internacional ‘no debe presionar para sancionar y poner al pueblo venezolano en una situación de gravísima dificultad’.

Confió en que la Unión Europea active su capacidad diplomática y que se celebren elecciones ‘con todas las garantías y observadores internacionales, pero no con el objetivo de tumbar al Gobierno como sea’, aclaró.

El destacado dirigente del Partido Socialista Obrero Español deseó, además, que una mayoría de la oposición venezolana participe en las elecciones parlamentarias programadas para el venidero 6 de diciembre.

Esos comicios, insistió, deben celebrarse con todas las garantías, pero también asumiendo que ‘el Gobierno es el que es’ y que ha tenido éxitos electorales, en alusión a los numerosos triunfos logrados en las urnas por el ejecutivo constitucional de Nicolás Maduro.

Defendió una solución política acordada entre los venezolanos, donde prime construir una democracia consensuada y no los ‘intereses geoestratégicos de las grandes potencias’, enfatizó.

Para el exgobernante socialdemócrata, la imposición del unilateralismo y del uso de la fuerza ha demostrado ser un desastre.

Por el contrario, consideró que, para encontrar un arreglo a esa crisis, ‘hay que aceptar que el chavismo es una realidad política’.

Hay una parte de la oposición a la que le cuesta aceptarlo, pero cualquier salida electoral y democrática debe partir de esa idea, aseguró.

El exjefe del Ejecutivo español valoró que el tiempo le está dando la razón y que el reconocimiento del opositor Juan Guaidó como presidente encargado, ‘debe ser sometida a un juicio autocrítico por quienes la promovieron, Estados Unidos’.

Espero que ese error sirva de lección y no se vuelva a repetir, zanjó.

Madrid, 14 de julio 2020
Crónica Digital/PL

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