‘Jornada histórica para Europa’, escribió tras el acuerdo Macron en su cuenta en Twitter, red social que poco después fue escenario de críticas desde los más diversos sectores de la escena política francesa.
Para el secretario del Partido Comunista, Fabien Roussel, no hay nada de histórico y mucho de catástrofe en el pacto, el cual mostró una vez más las fracturas internas en un bloque donde los países llamados frugales (Austria, Dinamarca, Países Bajos y Suecia), a los que se sumó Finlandia en el proceso, roban protagonismo con su ‘disidencia’ al dúo timonel Alemania-Francia.
Veremos si los franceses aplaudirán este plan cuando llegue la factura a pagar, dijo el diputado, quien advirtió ‘austeridad a la vista’.
Para Roussel y otros políticos, como el líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, la Política Agrícola Común (PAC), la salud y la ecología, fueron las víctimas iniciales del acuerdo y del presupuesto de la UE.
Francia no será más soberana sobre su deuda y tampoco es cierto que esta se mutualizó en Europa, porque cada país deberá pagar la suya, precisó Mélenchon.
El dirigente insumiso insistió en que es falso que las subvenciones compensen las pérdidas y Europa saldrá fortalecida, y acusó a Macron de montar una operación de comunicación.
A su juicio, el jefe de Estado perdió en la negociación frente a los frugales, los tacaños y la extrema derecha gobernante en Polonia y Hungría.
Por su parte, la líder de Agrupación Nacional (extrema derecha), Marine Le Pen, opinó en Twitter que se trata ‘del peor acuerdo para Francia en toda la historia de la UE’ y el jefe de Los Republicanos (derecha tradicional) en la Asamblea Nacional, Damien Abad, consideró que ‘salva los muebles’, pero deja muchas interrogantes.
La víspera, Macron celebró en su segunda entrevista televisada en una semana el plan y pidió a los franceses ser conscientes de lo alcanzado, mientras el canciller Jean-Yves Le Drian destacó en un debate en la Asamblea el principio de un préstamo colectivo, con la distribución de subvenciones a las regiones y países más golpeados.
El jefe de Estado aseguró en el canal TF1 que el pacto constituye ‘el momento más importante de la UE después de la creación del euro’, por lo que quisiera que sus conciudadanos midan la importancia del mismo.
Según Macron, el consenso materializado representa el proyecto que defendió en septiembre de 2017 en la Sorbona, cuatro meses después de ganar el Palacio del Elíseo, con una Europa más fuerte entre las prioridades de su gestión, pero no poco piensan diferente y habrá que ver qué sucede en la práctica.
París, 22 de julio 2020
Crónica Digital/PL