La marcha de campesinos paraguayos que protestan contra el gobierno y piden la renuncia del presidente Horacio Cartes entró hoy en Asunción tras una larga travesía desde los departamentos del norte y este del país.
Miles de labriegos, convocados por el Partido Paraguay Pyahurá, con el apoyo de la Federación Nacional Campesina (FNC), el Frente Guasú y otras organizaciones, avanzarán durante la mañana hacia la plaza situada frente al Congreso de la Nación donde se realizará el acto central al final de la tarde.
En el lugar se encuentran ya desde la víspera otros grupos procedentes de las zonas cercanas de esta capital que tuvieron a su cargo diversas actividades en varias zonas de Asunción, incluyendo una sonada condena a la política agropecuaria del gobierno frente al ministerio de Agricultura.
Las columnas que penetraron esta madrugada en territorio capitalino e hicieron un alto para varias horas de descanso, mantienen también entre sus consignas fundamentales el cese de la represión en el campo, la reforma agraria, el rechazo a la privatización de empresas estatales y el repudio a la narcopolÍtica.
En una alocución inicial, Teodolinda Villalba, secretaria general de la FNC, acusó al Poder Ejecutivo de mantener altos grados de pobreza y miseria en el campo, facilitar el desalojo a comunidades enteras por parte de los latifundistas y criminalizar la lucha popular.
Un contingente policial acompañó la marcha durante todo su recorrido y paralelamente fuerzas de la policía de choque tomaron posiciones en los alrededores del Congreso y de la plaza que rodea el edificio.
Una nueva declaración de los organizadores de la demostración campesina reclamó la constitución de una Junta Patriótica integrada por personalidades independientes y respetadas por el pueblo en sustitución del actual gobierno al cual consideran contrario a las expectativas populares.
El descontento social también fue expresado por el dirigente sindical Julio López quien anuncio que las centrales de trabajadores decidieron iniciar los preparativos para una próxima huelga general en vista del fracaso de las mesas de diálogo desarrolladas durante los últimos meses.
Crónica Digital, 10 de Febrero 2015
