El presidente de la Izquierda Ciudadana, diputado Sergio Aguiló, salió nuevamente al paso de los cuestionamientos al ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo y asesores, por emitir boletas a empresa de Giorgio Martelli, vinculada a la investigación de SQM, precisando que “sostener un manto de sospecha sobre todos los que entregan boletas es un agravio gratuito a los más de 80 mil chilenos que trabajan, que entregan boletas y pagan sus impuestos”
“En Chile existen cerca de 80 mil chilenos que todos los meses entregan boletas por sus servicios; unos 30 mil en la administración pública, y más de 50 mil en el sector privado. Sostener un manto de sospecha sobre todos los chilenos que entregan boletas es un agravio gratuito a los chilenos que trabajan, que entregan boletas para pagar impuestos. Lo que tiene que investigar la justicia es muy preciso: a un grupo reducido de chilenos que siendo candidatos le pidieron a familiares o amigos que entregaran boletas por acciones o trabajos no realizados, para que la empresa le entregara dinero para financiar sus campañas y a su vez le permitiera a las empresas eludir impuestos para defraudar al fisco”, precisó en entrevista a CNN Chile.
“Por eso –añadió- si hacemos una confusión completa y ponemos en tela de juicio a los más de 80 personas que han emitido boletas, entonces lo que estamos haciendo es un agravio gratuito a gente que ha trabajado honestamente toda su vida. No veo por qué el ministro del Interior cuando no era ministro, cuando era un ciudadano común y corriente y trabajaba honestamente y por esa labor le pagaban un sueldo, no veo por qué deba ser tratado de manera distinta al resto de los chilenos que trabajaba y daba boletas”
Subrayó que “Peñailillo no tenía otra opción que trabajar en el ámbito privado, porque obviamente no lo iban a contratar en el servicio público durante la administración de Piñera. Trabajar en una empresa privada no es solamente legal, es altamente ético y digno haberlo hecho. Él al revés de los que financiaron campañas, quería pagar impuestos y por eso entregaba boletas. Ahora, que políticos inescrupulosos hayan entregado boletas inventando trabajos, justamente para que la empresa que los financiaba eludiera pagos de impuestos, es todo lo contrario de lo que hizo Rodrigo Peñailillo y sus asesores, que no siendo candidatos tenían que trabajar para vivir”.
Sobre la denuncia hecha por el ex senador Camilo Escalona en orden a que Ponce Lerou financió el 2009 a ME-O para dividir a la Concertación, Aguiló precisó que “no tengo ninguna información o antecedente que me lleve siquiera a tener el grado de sospecha de que Ponce Lerou haya financiado la campaña de Marco Enriquez-Ominami. De lo que no tengo ninguna duda es que Ponce Lerou debe ser uno de los empresarios más corruptos del país. Él se hizo de las empresas porque tenía un suegro que era un dictador, criminal y asesino, que le entregó en bandeja esas empresas. Y él quiso comprar seguridad y simpatía, como lo hace en Sicilia la mafia de la Cosa Nostra, aportando recursos no solo a la derecha, de la que él es parte, sino que también a otros sectores de la vida política. Y eso, que también hicieron otros empresarios, me parece profundamente deplorable”.
Aguiló dijo que no “es buena idea adelantar las elecciones parlamentarias”, precisando que quienes han planteado esa posibilidad “son justamente sectores de la Concertación contrarios a las reformas profundas que lleva adelante el gobierno de la presidenta Bachelet y parte de la solución que hoy vivimos es justamente realizar esas reformas profundas”
Aguiló explicó que la IC es partidaria de “las más drásticas sanciones a las personas que han cometido delitos o ilícitos, aquellas personas que usaron boletas o facturas falsas para financiar sus campañas y permitieron devolución de impuestos, esas personas deben ser investigadas y sancionadas, si hay parlamentarios , que sean sancionados , si son de la derecha mayoritariamente, pero si hubiesen de la Nueva Mayoría también en eso no hay doble opinión en el mundo nuestro: sanciones drásticas a las personas que han cometido delitos.
Sin embargo, aclaró que “muy distinto es generar un cuadro apocalíptico donde se adelantan las elecciones, cosa que no ha ocurrido nunca en la historia de Chile. Si adelantamos las elecciones hoy, el país pasa a otra agenda. Definitivamente no es una solución, porque si se hacen nuevas elecciones sin un conjunto de transformaciones institucionales sustantivas para regular de manera sustantiva la relación dinero y política, para terminar con esto que quisieron hacer los grupos económicos que era comprar parlamentarios para tener su propio grupo de influencia, si no se termina con eso de manera drástica, se pueden adelantar miles de elecciones y parlamentos, pero siempre vamos a tener la sombra del poder del dinero cooptando a la política”.
Añadió que por todo lo anterior “estamos a la espera de las conclusiones de la comisión Engels, para transformarlas en iniciativas legales o proyectos de ley y en una nueva institucionalidad. Y en la Nueva Mayoría nos hemos comprometido a tramitarlas con la mayor celeridad para terminar definitivamente con la relación del dinero y la política”.
Santiago de Chile, 21 de abril 2015
Crónica Digital
