Según el informe, el EI ha sufrido desde enero de 2016 importantes golpes en Siria e Iraq, donde estableció sus bastiones de cara al declarado objetivo de refundar el Califato.
En ese sentido, el documento remitido al Consejo por el secretario general António Guterres señala que los yihadistas mantienen su dominio en un sector de la ciudad iraquí de Mosul y en la siria de Raqqah.
Las bajas y la pérdida de territorios llevan al grupo a reorganizar sus estrategias, las cuales incluyen el incremento de la inspiración de actos terroristas en varias partes del mundo, precisa.
Otra amenaza identificada en el reporte tiene que ver con la salida de los extremistas de Siria e Iraq, ya que muchos regresan a sus naciones de origen o viajan hacia un tercer país.
De acuerdo con el secretario general de la ONU, el EI continúa explotando Internet y las redes sociales como herramientas de propaganda e instigación a la violencia.
Se espera que en su reunión de hoy, los miembros del Consejo de Seguridad ratifiquen el compromiso con la derrota de la organización islamista, lo cual Guterres llama a hacer dentro del marco de las leyes internacionales y el respeto a los derechos humanos.
La sesión transcurre en un escenario marcado por recientes ataques terroristas, que han dejado decenas de muertos y heridos en ciudades de Europa, Asia y el Norte de África.
Naciones Unidas, 8 de junio 2017
Crónica Digital /PL
