El presidente de Chile, Sebastián Piñera continúa recibiendo hoy todo tipo de calificativos a su discurso del sábado último en el cual presentó incontables promesas pero casi ningún resultado sobre su gestión.
En momentos en que el país enfrenta una coyuntura económica nada halagüeña el mandatario habló muy poco sobre el tema, y por ello el presidente de la Cámara de Diputados, el demócrata cristiano Iván Flores, lamentó las pocas medidas señaladas por Piñera para recuperar el crecimiento.
Por su parte la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Loreto Carvajal, del partido por La Democracia consideró que la Cuenta Pública de Piñera sobre la gestión del último año fue excesivamente larga y sin una referencia exacta ni precisa a las regiones.
También señaló que hubo poca referencia en materia de seguridad pública, por ejemplo en materia de vigencia y prevención de la violencia de género, considerando la alta tasa de feminicidios que presenta el país.
En tanto, los presidentes de los partidos Comunista, Progresista y Federación Regionalista Verde Social (Frevs), que componen el pacto Unidad para el Cambio, catalogaron de populista y demagógico el discurso de dos horas del mandatario.
Al respecto advirtieron que Piñera hizo una cantidad tal de anuncios que difícilmente podrán ser cumplidos en su mandato, tales como la construcción de un tren rápido entre Santiago y Valparaíso, de un Metro en la ciudad de Concepción y un nuevo aeropuerto para la capital que difícilmente cuenten con capital para todos.
Para Jaime Mulet, presidente de la Frevs, la cuenta pública fue como un reality show, en el cual Piñera le ofreció al país ilusiones más que proyectos concretos, al tiempo que dio por hechos una serie de cambios y transformaciones que por ahora no pasan de ser proyectos de ley.
El presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, dijo que los planteamientos fueron efectistas, porque muchos solo son promesas a futuro que para cumplirlas deberán pasar hasta 30 años.
Uno de las propuestas con mayor repercusión del discurso fue la de reducir la Cámara de Diputados a 120 integrantes y a 40 miembros el Senado, sobre lo cual Teillier consideró que eso sería como volver en cierta medida al binominalismo impuesto en dictadura.
Asimismo dijo estar de acuerdo en que se limite la reelección de los parlamentarios, pero si esa reforma lo que persigue es ahorrar recursos, lo mejor sería bajar el sueldo a los diputados, senadores y ministros, medida que ya han propuestos miembros de la oposición.
Las crecientes críticas al discurso de Piñera contrastan con la exitosa imagen ofrecida por la mayoría de los medios, casi todos afines al gobierno, y la bancada de gobierno, que lo aplaudió frenéticamente durante la ceremonia, aunque también en ese sector algunos aseguran que hubo demasiadas promesas y pocos resultados.
Santiago de Chile, 3 de junio 2019
Crónica Digital
