Lun Ene 22 , 2024
Por Cristóbal Chávez Bravo La inteligencia artificial (IA) tiene un gran potencial que puede ayudar a ser un mundo mejor, pero deben resolverse grandes preguntas, dilemas y marcos éticos, concluyó el Congreso Futuro de Chile, espacio de encuentro de las ideas y el pensamiento en América Latina, realizado del 15 al 20 de enero en la ciudad de Santiago. El Congreso Futuro de Chile, que este 2024 cerró su decimotercera versión, se realizó por primera vez en el Centro de Extensión del Instituto Nacional, espacio cultural en el casco histórico de Santiago, donde se reunieron autoridades, académicos y científicos de relevancia, tanto del país sudamericano como del mundo. Entre las charlas destacadas estuvo la del francés Stanislas Dehaene, neurocientífico reconocido por sus estudios en las bases cerebrales de operaciones matemáticas y procesamiento numérico, al mencionar que cada parte milimétrica del cerebro tiene una especialización. Sostuvo que la IA proporciona un modelo potencial para comparar con el cerebro humano, aunque la estructura cerebral difiere pues el potencial de la mente humana puede aprender más rápido debido a su estructuración desde el nacimiento. Dehaene indicó que por esa razón y a pesar del avance de la IA, los niños deben tener interacciones sociales necesarias a través del lenguaje. A su vez, el filósofo español Daniel Innerarity, afirmó en su charla que la IA «difiere significativamente» de la lógica humana, en especial en contextos políticos donde la ambigüedad es prevalente. Enfatizó que la democracia no puede ser reemplazada por la IA, ya que representan dos formas distintas de pensar y decidir, por lo que llamó a apreciar la importancia de la conversación democrática en la formación de intereses y la necesidad de considerar la sociedad resultante que se aspira a construir. En tanto, la profesora china Zhang Min aseveró en su exposición que la IA tiene muchos desafíos por delante, pero se le puede utilizar para mejorar la vida de los seres humanos y crear un mundo mejor. «Que podamos utilizar la IA para mejorar la vida de los seres humanos y para crear un mejor mundo, tal como lo hemos hecho hasta el día de hoy», dijo la experta en análisis del comportamiento de usuarios. Zhang apostilló que todavía queda un largo camino por recorrer en cuanto a la IA, al advertir que «hay muchos retos por delante» y que el primero es «la parte ética», por lo que se debe trabajar de manera ardua en este campo. «No se trata solamente de la ética para la IA. Se trata del tema ético para nosotros como humanos, para nosotros cuando estamos utilizando las técnicas de la IA, porque nosotros también debemos tener cierto nivel de ética», remarcó. En esa línea, el estadounidense Kevin White, director del Laboratorio AI for Good de Microsoft, que se enfoca en soluciones para desafíos sociales, refirió la importancia crítica de la información precisa y oportuna durante crisis. A decir de White, la IA ha sido capaz bajo este escenario de utilizar modelos para identificar de manera […]