Reino Unido reclamó hoy mayor implicación de la Unión Europea (UE) en la devolución de los migrantes económicos a sus países de origen, casos que no tienen derecho a la protección internacional.
La ministra de Interior británica, Theresa May, estimó que el bloque debe ser más firme en su política de retorno, cuando al contiene ha llegado más de medio millón de indocumentados este año.
«Reino Unido siempre ha dicho que deberíamos enviar de vuelta a los inmigrantes económicos a sus países de origen, por eso debemos ser más estrictos con quienes están abusando de nuestro sistema de asilo», declaró a la prensa.
Aunque aceptó recibir a unos 20 mil refugiados sirios en los próximos cinco años como parte de un programa comunitario, la nacion británica ha sido una de las más reacias a recibir migrantes, en medio de una crisis considerada la peor desde la Segunda Guerra Mundial.
May participa aquí en una reunión de ministros de Interior de la UE en la cual se planea definir medidas para una política de retorno europea eficaz.
El grupo de los 28 acordó un plan para recibir a unos 160 mil demandantes de asilo en los diferentes estados, mientras el resto de los llegados, unos 400 mil, podrían ser objeto de las políticas de retorno.
Hungría ha protagonizado el grupo de los que rechazan abrir puertas a la migración, una nación que ha gasta tres veces más dinero en levantar vallas y muros para impedir la entrada que en acoger migrantes, denunció una organización no gubernamental.
De acuerdo con el reporte, Budepest ha destinado 98 millones a edificar las vallas fronterizas, mientras la Oficina de Inmigración y Nacionalidad tiene para este año un presupuesto de 27,5 millones.
En consecuencia, Hungría se ha convertido en una zona sin protección a las personas refugiadas, agregó el informe.
Luxemburgo, 8 octubre 2015
Crónica Digital / PL