Las acciones impulsadas por la actual administración estadounidense de separar a los menores de edad de sus familiares son inadmisibles, cómo es posible que un Estado comenta abusos contra los niños para intentar disuadir a los padres de entrar indocumentados al país, cuestionó.
Por ello, instó a Estados Unidos a poner fin inmediatamente a tal práctica.
De acuerdo con la directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Henrieta Fore, ‘detener a los niños y separarlos de sus familias afecta el desarrollo infantil a largo plazo’.
Desde octubre del año pasado, cientos de niños centroamericanos han sido detenidos en la frontera y separados de sus familias, lo cual supone un trauma para ellos y los hace mucho más vulnerables a la explotación y los abusos, alertó Unicef.
El bienestar de los más pequeños debe constituir prioridad y Estados Unidos necesita tener en cuenta tal premisa a la hora de aplicar sus leyes migratorias, indicó esa agencia de la ONU.
Hace unos días, el secretario general de la ONU, António Guterres, aseguró que ‘los refugiados y los migrantes deberían ser tratados siempre con respecto y dignidad’.
Asimismo, rechazó la separación de los menores de edad y destacó la necesidad de preservar la unidad familiar.
Como cuestión de principios, Guterres cree que los refugiados y los migrantes siempre deben ser tratados con respeto y dignidad, y de conformidad con el derecho internacional vigente.
En las últimas semanas, se estima que cerca de dos mil niños se han visto forzados a separarse de sus familias en la frontera entre Estados Unidos y México.
Grabaciones e imágenes difundidas por la prensa muestran las deplorables condiciones en las que se encuentran esos menores de edad: enjaulados, durmiendo en el piso y custodiados por agentes de emigración.
Naciones Unidas, 21 de junio 2018
Crónica Digital /PL