La publicación, convertida en los últimos años en uno de los principales detractoras de la Isla, afirmó en fecha reciente que el mandatario cubano es uno de los diez hombres más ricos del mundo.
«El objetivo de esta calumnia es evidente.
Se trata de debilitar a toda costa el influjo que Fidel Castro ejerce en la voluntad de los pueblos de exigir sus derechos nacionales y sociales, influjo que se asienta en los valores éticos que lo caracterizan», subraya el PC.
En una declaración de su comisión de relaciones internacionales, el conglomerado chileno destaca que «Fidel Castro es un gobernante de moral intachable, que ha conducido una revolución que es ejemplo de coraje, fortaleza y dignidad».
Resalta que el gobierno y el pueblo cubanos, bajo su dirección, han salido airosos de las agresiones y el bloqueo inhumano que el gobierno norteamericano mantiene desde hace más de cuatro décadas contra la Isla.
La declaración señala que la reciente respuesta del dignatario cubano, retando a la publicación y a las autoridades estadounidenses a presentar pruebas, ha dejado a los calumniadores en la estacada.
«Esta actitud resuelta puso a (George W.) Bush y los suyos en aprietos», dice, tras apuntar que el mandatario norteamericano, su padre, su vicepresidente y muchos otros, usan el poder para enriquecerse».
Agrega que «esta posición de insobornable dignidad (del líder cubano) constituye un peligroso desafío».
El texto recalca que Forbes tuvo que retroceder al reconocer que no tiene antecedente alguno de cuenta bancaria de ningún tipo.
La publicación finalmente reconoció que su afirmación se basa en las propiedades estatales cubanas de las que Fidel Castro sería parcialmente propietario. «Ha pasado de la calumnia al ridículo», sostiene el PC chileno.
El texto condena «esta burda maniobra» y expresa a Fidel Castro su plena solidaridad.
Señala asimismo que su experiencia directa de los aportes del pueblo cubano y su dirección «a nuestras luchas nos han llevado a admirar y respetar la revolución honesta, justa y transparente que allí cursa».
Santiago de Chile, 22 de mayo 2006
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