La mandataria anunció un paquete de iniciativas para garantizar la plena integración de todas las étnias que habitan en el país con motivo de la celebración del Año Nuevo Mapuche (We Tripantu).
Entre ellas se encuentra la ratificación del convenio 169, que permite incorporar, de acuerdo a las legislaciones específicas de cada país, los derechos de los pueblos originarios.
Buscará, además, fórmulas para que algunos agregados culturales sean representativos de las distintas etnias.
«No se trata sólo de pobreza, sino también de hacernos cargo de las necesidades más urgentes de las comunidades indígenas, y reconocer a los pueblos que son diversos», apuntó tras insistir en el reconocimiento de los derechos de esos pueblos en Chile.
Bachelet hizo hincapié en que se han logrado grandes avances. «Pero queremos lograr a más breve plazo la rectificación del convenio 169 y el reconocimiento constitucional de los pueblos originarios (…) haremos todo lo que esté a nuestro alcance para esta tarea», apuntó.
Aprovechó también de comprometerse a ampliar el Fondo de Tierras, además de los recursos para mejorar caminos rurales, ampliar la cobertura de agua potable rural y el sistema de becas indígenas.
«De eso se trata, no sólo de valorar en lo propio, en su identidad cultural, sino también a su participación como ciudadanos (…) vamos a propiciar la participación de los dirigentes indígenas en la discusión de los grandes temas de políticas públicas», precisó.
Se refirió en la necesidad de avanzar en la designación de agregados culturales de las diferentes etnias que existen en Chile para que «muestren a la comunidad internacional la inclusión a la vida institucional del país».
Otra medida más concreta e inmediata es la puesta en marcha de la segunda etapa del Programa Orígenes, que permitirá ampliar a mil nuevas comunidades los beneficios otorgados por esta iniciativa.
Santiago de Chile, 23 de junio 2006
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