Ese ataque sucedió a la amenaza lanzada por los invasores contra esa localidad y la de Beit Lahya en la misma dirección.
Las tropas israelíes penetraron la víspera en el sur de la Franja con el alegado propósito de buscar y rescatar a un soldado secuestrado por grupos de la Intifada (levantamiento) el pasado domingo.
Sin embargo, políticos palestinos denunciaron que estas acciones militares y redadas contra políticos estaban bien planificadas y se organizaron con bastante antelación al rapto.
El vicepresidente del Consejo Legislativo (parlamento palestino), Ahmed Bahar, manifestó que Israel soportará las consecuencias que tengan las detenciones de los dirigentes.
«Estas acciones estaban planeadas desde las elecciones parlamentarias palestinas» en enero pasado, dijo y descartó que el plan se circunscribiera a presionar a los secuestradores de un recluta israelí.
También los medios de difusión hicieron énfasis en que los planificadores de la guerra en Tel Aviv esperaban un pretexto para desatarla, con el objetivo de destrozar al Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas) y de asesinar a sus líderes.
Por el momento, las tropas detuvieron en Cisjordania a unos 90 políticos y militantes del Hamas, entre ellos varios ministros y decenas de diputados de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
Según fuentes cercanas al Ministerio de Defensa, su titular, Amir Peretz, autorizó este jueves a las fuerzas armadas a continuar con las sucesivas etapas del plan de acción contra los territorios de la Franja de Gaza y Cisjordania bajo jurisdicción de la ANP.
La segunda fase de la denominada operación Lluvias de verano es la ocupación del norte de la Franja para poner fin a los disparos de cohetes artesanales palestinos Al Kassam.
Gaza, 29 junio 2006
Prensa Latina , 0, 58, 2