Exámenes realizados a restos óseos de 47 luchadores descubiertos en 1993, mostraron que sus combates se atenían a reglas, que prohibían el salvajismo en las batallas y las mutilaciones.
Esos son los resultados de la investigación desarrollada por Kart Grosschmidt, de la Universidad Médica de Viena, y Fabian Kanz, del instituto arqueológico austriaco.
Según los análisis a los huesos encontrados en tumbas de la ciudad de Efeso en sus refriegas esos gladiadores del siglo II usaban un solo tipo de arma.
Además los combatientes mal heridos eran rematados rápidamente por un verdugo con un golpe contundente en la zona parietal de cabeza.
Londres, 23 febrero 2006
Crónica Digital/PL , 0, 73, 10
Vie Feb 24 , 2006
Sergio Canals Baldwin fue uno de los principales colaboradores del recordado Gonzalo Bertrán en la realización de programas tales como Viva el Lunes. En aquella actividad estaba en junio del 2000, cuando el Consejo de Defensa del Estado solicitó al ministro en visita Sergio Muñoz que lo sometiera a proceso como cómplice del homicidio del ex presidente de la ANEF, Tucapel Jiménez, ocurrido el 25 de febrero de 1982. En la sentencia del caso dictada por Muñoz se consignó que a fojas 1162 vuelta y 1166 vuelta constaban las declaraciones de Canals, quien expresó que fue oficial de Ejército y se desempeñó en la Central Nacional de Informaciones (CNI). Fue el segundo comandante de la División de Inteligencia de la Región Metropolitana entre 1981 y 1983, dijo, precisando que cumplió cumpliendo funciones administrativas y subrogó al comandante de la División cuando se ausentaba, con el cual se reunían semanalmente los jefes de unidades, en donde se impartían las instrucciones respecto de las prioridades de la parte operativa y los medios con los que contaban para ello. Uno de los jefes de unidad que mencionó era Alvaro Corbalán Castilla, a cargo de la Unidad Antisubversiva de la Central. Y recordó a las agrupaciones de Deportes, Educaciones, Asuntos Sindicales, Religiosos y una Oficina de Asuntos Generales, las cuales debían dedicarse a buscar información conforme a órdenes que emanaban del Estado Mayor, en circunstancias que ninguna operación se cumplió sin el conocimiento del comandante de la división. A fojas 3856, Canals aclaró que el coronel Roberto Schmied Zanzi era el comandante de la División de Inteligencia Metropolitana, en la cual trabajó. Añadió que dentro de los medios que realizaban sus funciones los agentes estaban seguimientos, vigilancias, intercepciones telefónicas y recolección de información en general. En lo relativo a las intercepciones telefónicas estaba a cargo el coronel (Jorge) Vizcaya y se encontraba la unidad en la parte posterior del cuartel central. Señaló que el análisis de inteligencia se procesaba y daba origen a informes que eran confeccionados diariamente o día por medio, los que eran entregados personalmente por el director al Presidente de la República con quien se reunía para estos efectos todos los días, día por medio o en las oportunidades que el Presidente lo requería. Además, dijo, el director integraba el Comité Político y asistía a las reuniones de Gabinete. Manifestó que ingresó a la Central Nacional de Informaciones en 1980 y se retiró en febrero de 1983 y de esta fecha hasta 1985 prestó seguridad indirecta a Pinochet en los viajes que realizaba en la Carretera Austral. En esa última labor observó que realizaba visitas al sur en los meses de verano, el cual recibía las informaciones diarias que se le enviaban sobre la información del país. A fojas 1150 y 3183 Roberto Schmied declaró que mientras ejerció como comandante de la División de Inteligencia Metropolitana no se hacía nada sin su conocimiento, puesto que estaba al tanto de todo, sin que pueda responder de aquello que sucedía en su ausencia, […]