El conflicto en el oriente ucraniano acumula en el último año al menos seis mil 116 muertos y 15 mil 474 heridos, informó hoy la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
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En declaraciones a la prensa desde la sede de ese órgano, en Ginebra, la portavoz Ravina Shamdasani insistió en que se trata de datos estimados, los cuales «pudieran ser considerablemente superiores».
Cientos de personas permanecen desaparecidas y cientos de cuerpos continúan pendientes de su recuperación y/o identificación, advirtió.
Según la vocera, en lo que va de 2015 alrededor de 400 civiles han perdido la vida como resultado de los bombardeos indiscriminados contra zonas residenciales en Donetsk y Luhansk, y en áreas bajo control gubernamental.
El año pasado, los rebeldes con el apoyo de la población declararon la independencia de Donetsk y Luhansk, en rechazo al golpe de Estado de febrero de 2014, que con respaldo de occidente depuso a Víktor Yanukóvich y llevó al poder a autoridades de marcada postura anti-rusa.
La respuesta gubernamental fue una ofensiva militar caracterizada por los ataques artilleros contra las ciudades rebeldes, con saldo de cientos de víctimas fatales, ataques silenciados o minimizados por medios occidentales, que generalmente dan cobertura a las denuncias de Kiev sobre «los crímenes» de los separatistas.
Además de los miles de muertos atribuidos a las hostilidades desde abril del año pasado, casi dos millones de personas han dejado desde entonces sus hogares para escapar de la violencia, entre ellas 800 mil refugiadas en países vecinos, sobre todo Rusia.
Naciones Unidas reiteró hoy sus preocupaciones por la crisis humanitaria en el oriente ucraniano, potenciada por rupturas del alto el fuego que las partes lograron en febrero último, a partir de la decisiva gestión de Rusia, Alemania y Francia.
Naciones Unidas, 17 abril 2015
Crónica Digital / PL
