El Director del INDH valoró la medida señalando que “este fallo restaura el honor y la dignidad de personas que durante más de 40 años han debido cargar con el estigma de ser tratados como traidores a la patria”.
Por la unanimidad de la Segunda Sala de la Corte Suprema han sido anuladas las sentencias dictadas en 1974 y 1975 por los Consejos de Guerra de la Fuerza Aérea de Chile en el caso caratulado “Aviación contra Bachelet y otros”, que condenaron a decenas de efectivos de esa institución y a algunos civiles a los que acusaron de “traición a la patria”, entre otros cargos, por haberse opuesto al Golpe de Estado de 1973.
El fallo del máximo tribunal acogió de esta forma un recurso de revisión presentado por el Fiscal Judicial de la Corte Suprema, Juan Escobar Zepeda, para dar cumplimiento a una sentencia contra el Estado de Chile dictada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en la causa caratulada como “Omar Humberto Maldonado Vargas y otros contra Chile”.
El Director del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Branislav Marelic, dijo que se trata de una sentencia “inédita e histórica en la jurisprudencia chilena, que eleva el prestigio de Chile ante los organismos y tribunales internacionales”.
Según Marelic, el fallo del máximo tribunal es un avance sustancial en las reparaciones que el Estado de Chile debe proveer a las víctimas sometidas a Consejos de Guerra, acusadas de delitos que nunca existieron y sometidas a torturas y vejámenes. “Este fallo restaura el honor y la dignidad de personas que durante más de 40 años han debido cargar con el estigma de ser tratados como traidores a la patria”.
La sentencia acoge el recurso especial del Fiscal Judicial Juan Escobar Zepeda y decretó la inocencia de más de 80 personas condenadas por tribunales en tiempo de guerra.
En sus consideraciones los ministros explican que la totalidad de los prisioneros sometidos a los Consejos de Guerra no tuvieron un debido proceso, fueron sistemáticamente víctimas de torturas y malos tratos, y que vivieron largos periodos de aislamiento, vendados y amarrados. Los ministros también estimaron que los Consejos de Guerra formados inmediatamente después del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, actuaron en contra la legalidad entonces vigente, la que era normada por la Constitución de 1925 posteriormente derogada por la dictadura.
Santiago de Chile, 4 de octubre 2016
Crónica Digital
Mar Oct 4 , 2016
El fundador de la plataforma Wikileaks, Julian Assange, anunció hoy aquí una serie de nuevas revelaciones para los próximos meses, relacionadas con las elecciones presidenciales en Estados Unidos (EEUU), entre otros temas. Assange realizó estas declaraciones al intervenir, a través de una videoconferencia, en un acto organizado en esta capital para celebrar el décimo aniversario de su organización.Según avanzó el periodista australiano, recluido en la embajada de Ecuador en Londres, la primera publicación tendrá lugar antes del próximo domingo y pretende hacerlo tres veces a la semana, hasta los comicios estadounidenses, previstos para el 8 de noviembre. Analistas consideran que parte de esos documentos podrían perjudicar a la candidata demócrata, Hillary Clinton, como sucedió en recientes filtraciones de WikiLeaks. El civeractivista también prometió difundir en las próximas diez semanas informaciones sobre la guerra, las armas, el petróleo, Google y el espionaje masivo. Solo precisó que los documentos conciernen a tres grandes organizaciones en tres estados diferentes. Assange denunció, una vez más, las fuertes presiones internacionales que sufre el gobierno de Ecuador por concederle asilo político en su embajada en Londres. Desde el 2012, se encuentra recluido en esa legación, para evitar su extradición a Suecia, donde se le acusa de presuntos delitos sexuales que él niega. Melinda Taylor, integrante del equipo de defensa de Assange, denunció que las presiones son de índole comercial y política, y aludió a las quejas de Quito al respecto. En febrero pasado el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas dictaminó que la detención de Assange era ilegal y pidió su liberación. La justicia sueca actuó contra el programador informático a raíz de que este puso en aprietos a varios gobiernos, en particular al estadounidense, con la divulgación de miles de cables secretos del Departamento de Estado de ese país. La orden de arresto, según Assange, no es más que una maniobra para enviarlo a EEUU, donde sería juzgado por difundir información confidencial sobre la seguridad nacional norteamericana, y podría ser condenado a cadena perpetua o a muerte. Wikileaks alcanzó popularidad en 2006, y ha filtrado, según su fundador, once millones de documentos clasificados de todo el mundo a través de su sitio en Internet. Berlin, 4 de octubre 2016 Crónica Digital / PL