La Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) inició este jueves una campaña a través de las redes sociales contra criminales de la dictadura, prófugos de la justicia en Chile.
Se trata de tres exmilitares y dos excarabineros que trabajaron a las órdenes de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), condenados a largas penas de cárceles por crímenes de lesa humanidad.
Asesinos y torturadores confesos, se trata de Juan Eduardo Rubilar, Juan Carlos Orellana (prófugo desde marzo pasado), Ricardo Lawrence Mires, Pedro Javier Guzmán y Andrés Leopolodo Flores, desaparecido desde el 15 de junio de 2016.
Todos con sentencias hasta dobles de más de 15 años de prisión, salvo Orellana que tiene una sola de 10 años.
La AFEP recalcó que los casos corresponden a agentes del aparato de represión del régimen de facto, y que deben cumplir penas de entre 10 a 25 años de cárcel por determinaciones de los Tribunales de Justicia.
Los familiares de ejecutados políticos hicieron un llamado a la ciudadanía a entregar información sobre los criminales que están prófugos hace meses.
Son violadores de derechos humanos y genocidas, remarcó la AFEP, que invitó a la población a entregar «información fidedigna» a la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones (PDI) al teléfono +562-27082248.
«En este país hay represores de la dictadura prófugos hace meses cuando por fin los tocó la mano de la justicia, ayúdennos a encontrar a violadores de derechos humanos y genocidas» añadió.
La agrupación señaló que como hace décadas, «nos organizamos para luchar por la Verdad y la Justicia».
Durante sus 17 años en el poder, la junta militar pinochetista dejó un saldo luctuoso de más de tres mil 200 asesinatos, alrededor de mil 200 detenidos-desaparecidos y unos 33 mil torturados.
Santiago de Chile, 8 de junio 2017
Crónica Digital/PL