Crítica
Por Miguel Alvarado Natali, Editor de Cultura
Levitas, es una obra cuyas protagonistas están llenas de sentimiento de culpa y miedos a un Dios castigador. Escrita por Paly Pavez que además es parte del elenco y con la dirección de Eduardo Luna y Alexis Moreno Venegas. De la Compañía La Familia teatro hacen su última presentación hoy en la sala Mori de Recoleta, para luego salir de gira por regiones.
La hermana Claudia vuelve al coro de la Iglesia Evangélica Pentecostal, de la cual se había alejado después de fallecer su padre, perteneciente también a esa comunidad. Entonces comienzan los ensayos junto a las hermanas Tavita, Debora y Ruth. Pero la Iglesia ha cambiado, son menos los fieles que asisten al culto y el encargado del coro anda desaparecido, lo que dio paso a ciertas interrogantes, comentarios y cuestionamientos sobre el papel de la iglesia. La primera en sincerarse fue Ruth (Belén Herrera Riquelme), es hija del pastor, de niña ha tenido que llevar ese peso y cuidar su comportamiento por miedo a su padre y a Dios. Les confiesa a las demás que ha ido a bailar a la disco, algo que la Iglesia no permite. Luego fue la hermana Debora (Pamela Lizama) ella está angustiada, el tiempo es su agonía, tiene cuatro hijos, su marido no es evangélico y entre su casa y la Iglesia encuentra tiempo para sí misma –mientras espera la micro en el paradero-. En tanto, Claudia (Carolina Castro) hace un relato del abuso que sufrió por parte de su padrastro, ella regresa con estudios de música y todavía con la fe en alto. Y por último tenemos a Tavita (Paly Pavez), es la que abre y cierra la Iglesia, toca la mandolina en el coro, es solterona, ultra conservadora, suele usar citas bíblicas para inculcar el temor en los fieles, ahora producto de la presión de las demás hermanas cuenta que se está culpando al director del coro de abusos que ella duda que se hayan cometido, haciendo vista gorda de estos ataques sexuales dentro del propio coro y la Iglesia.
Hay una estupenda interpretación de los roles, donde el vestuario es preciso y el espacio escénico aprovechado al máximo por las actrices, que en general están muy bien, especialmente el papel de Tavita. Aquí Paly Pavez dio con la esencia del personaje, una mujer mojigata y con la ignorancia de la verdadera fe. La canción religiosa que canta la actriz Carolina Castro haciendo playback es tan buena que es una pena que no la cante en vivo.
Con una escenografía sugerente y bien lograda en primer plano, donde elementos como flores, instrumentos musicales, bancas y un par de atriles para un coro, ya nos dan la atmosfera necesaria. Al fondo dos paneles puestos en ele señalan la punta de la Iglesia, pero muy bien pensado para la proyección de elementos audiovisuales tales como un video que nos cuenta sobre el mundo evangélico. La iluminación y la música están notables, siendo un gran aporte a la obra.
Levitas es un montaje donde el público es agarrado poco a poco por la trama, que no es solo cantos y alabanzas a Dios. Nos sumerge en este mundo evangélico pentecostal, donde sus feligreses están en constante sacrificio disciplinario, un temor a ese Dios castigador, una iglesia machista donde las mujeres están en funciones segundarias y deben ser un ejemplo a imitar y de obediencia a Dios. Es una puesta en escena que termina crecida, conmoviendo y con un clímax desgarrador, donde se impone una vez más una suerte de injusticia, la doctrina de la vergüenza y del fanatismo, pero que nos visibiliza esa violencia contra la mujer dentro de estas instituciones religiosas.
Santiago, Crónica Digital, 23 de Enero 2023
Dramaturgia: Paly Pavez
Dirección: Eduardo Luna y Alexis Moreno Venegas
Dirección Musical: Alexis Moreno Venegas
Diseño escénico: Karla Rodríguez
Diseño sonoro y música original: Francisco Moreira Herrera – Vñvm
Realización audiovisual: Eva Vera Cuadra
Dirección de arte audiovisual: Javiera Severino
Casting pieza audiovisual: Emilia Pavez
Diseño gráfico: Javiera Severino
Producción: Javiera Severino
Prensa: Claudia Palominos