Al destacar la presencia de Humala en la inauguración de un nuevo centro oftalmológico de la cubana Operación Milagro, dijo que lo había invitado porque en su país lo acusaban falsa e injustamente de «terrorista».
Recordó que lo mismo pasó con él en Bolivia y que el ataque es recurrente cuando un dirigente toma posiciones a favor de su pueblo.
Humala, por su parte, felicitó a Bolivia por haber encontrado su camino y dijo que en Perú el pueblo busca el suyo, para ejercer una política contraria al neoliberalismo, de efectos negativos para esa nación.
Señaló que en su país es calificado de candidato contrario al sistema, porque plantea posiciones anti-neoliberales y propugna políticas de atención a temas sociales, como la educación y la salud.
Al destacar sus afinidades con el anfitrión en cuanto a la unidad y solidaridad latinoamericana, llamó a hacer esfuerzos por preservar la Comunidad Andina de Naciones (CAN).
Confirmó sus discrepancias con los tratados de libre comercio (TLC) firmados por países andinos con Estados Unidos, que en opinión de Evo Morales abren los mercados locales en beneficio de las transnacionales.
El ganador de la primera vuelta electoral peruana dijo que se debe firmar un TLC con Estados Unidos, pero en bloque, como forma de obtener mejores condiciones para los países andinos, pero no individualmente.
Morales ratificó su tajante rechazo a los TLC, por servir al neoliberalismo y las transnacionales en desmedro de las economías nacionales y la CAN.
Criticó en ese contexto al presidente peruano Alejandro Toledo, a quien reveló haberle pedido que ayude a los pueblos indígenas, en un encuentro entre ambos en Chile, durante la toma de posesión de la presidenta Michelle Bachelet.
En lugar de ello y pese a su origen indígena, Toledo firmó un TLC con Estados Unidos, dijo Morales, al fustigar la actitud del mandatario vecino.
El mandatario boliviano saludó, por otra parte, a las organizaciones campesinas y de cultivadores de coca de Perú, donde dijo tener información que algunos de ellos están presos acusados de terrorismo.
De otro lado, las autoridades municipales de Copacabana y la vecina de Yunguyo entregaron al Jefe de Estado un pedido de impulsar una universidad indígena aymara binacional.
Copacabana, Bolivia, 8 de Mayo 2006
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