El evento, en el que participan un centenar de delegados de todo el país, fue inaugurado con una vistosa ceremonia en el Teatro Municipal de esta ciudad, capital de la provincia del mismo nombre, situada a unos 115 kilómentros de Santiago.
«Cuba merece todo nuestro respaldo y solidaridad», afirmó el jefe del gobierno local, Luis Mella, tras destacar los logros del proceso revolucionario cubano y la determinación de sus autoridades de luchar por el desarrollo y bienestar de su pueblo.
Mella, quien presidió el acto junto al embajador cubano en Santiago, Giraldo Mazola, llamó a los representantes del movimiento nacional de solidaridad chilenos a redoblar los esfuerzos en defensa de la isla y su derecho a ser independiente y soberana.
«Cuba nos convoca una vez más. Las más recientes amanezas del gobierno norteamericano y su denominado Plan Bush nos obligan a estar más alertas que nunca en defensa de la isla», afirmó por su parte Edgardo Hernández, presidente del comité organizador.
Hernández, quien preside el movimiento de solidaridad con Cuba en Quillota, dijo que al defender el derecho de los cubanos a construir una sociedad más justa «estamos luchando por la independencia y soberanía de nuestros pueblos».
«No es sólo por Cuba, la revolución nos está mostrando un camino, es por nosotros, por nuestro país, por nuestra realidad inmediata que se torna urgente la necesidad de esta lucha por un mundo mejor», apuntó.
En el acto fue leído un mensaje personal de Sergio Corrieri, presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), agradeciendo el apoyo del movimiento nacional de solidaridad con Cuba, y exhortandolo a redoblar sus esfuerzos en defensa de la isla.
El dirigente cubano dijo que ante las más recientes amenazas de Estados Unidos en su denominado Plan Busch, se requiere más que nunca el apoyo solidario de todos los pueblos del mundo, y en particuar «del hermano pueblo chileno».
Por su parte, el embajador cubano denunció la brutal campaña de los voceros del gobierno norteamericano a través de los medios occidentales a raíz de la enfermedad del presidente cubano, Fidel Castro, y alertó del peligro de nuevas agresiones.
«Amenazas y planes secretos del presidente Bush y su camarilla no faltaron y siguen latentes», afirmó el diplomático tras subrayar que aunque todo sigue normal en la isla, es preciso estar alertas para frenar cualquier aventura imperialista.
Mazola destacó que a pesar de la ausencia temporal del jefe de la revolución cubana «el país funciona y funciona bién», continúa el avance de la economía y se celebró con todo éxito la cumbre del Movimiento No Alineado.
«El cacareado Plan Busch, engendro injerencista que persiste en desconocer el protagonismo de nuestro pueblo y pretende exportarnos sus formas y modelos, constituye una brutal e inaceptable intromisión», afirmó.
El diplomático cubano exhortó al movimiento de solidaridad chileno y la comunidad internacional a exigir que se ponga fin a los nuevos planes agresivos contra la isla y se repete la independencia y la soberanía nacional.
Este evento, donde se analiza el trabajo de solidaridad con la isla y nuevas formas para incrementarlo, será clausurado mañana con un acto en la Plaza de Armas de esta localidad, en homenaje al mítico guerrillero argentino-cubano, Ernesto Che Guevara.
Quillota, 7 de octubre 2006
Crónica Digital/Prensa Latina , 0, 71, 3