La Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) llamó a la unidad y a la movilización en defensa de la construcción de la paz en el país.
Congreguémonos, marchemos, elevemos nuestras voces y alientos para impedir que el horror vuelva a tomarse Colombia, declaró el Consejo Político Nacional de la agrupación.
El mensaje de la FARC resaltó el significado del Acuerdo de Paz firmado con el gobierno de Juan Manuel Santos hace casi un año, tras el cual ‘la insurgencia puso todo de sí para honrar su palabra’.
‘Hoy somos un partido político en la legalidad, que hizo completa dejación de armas y se apresta a su primera participación en política electoral. Treinta de nuestros antiguos combatientes han perecido bajo las balas, al igual que varios de nuestros familiares, en una ola de violencia que suma ya más de 150 líderes sociales en los últimos dos años’, apuntó.
La declaración dada a conocer a la opinión pública recalcó la total disposición de la exguerrilla para el cumplimiento cabal de lo pactado en La Habana.
La FARC dijo estar consciente de las dificultades por las que atraviesa el gobierno nacional, ‘que han complicado en grado más que preocupante la implementación de cuestiones tan importantes como las circunscripciones especiales, nuestra participación política y la Jurisdicción Especial para la Paz, entre otros tantos asuntos’.
Fundamentó esa situación por la conocida existencia de sectores económicos y políticos que se oponen cerradamente al alcance efectivo de la paz en el país. La historia, acotó, terminará por ponerlos en su lugar.
Hizo mención también al actual contexto de paros y movilizaciones campesinas e indígenas en toda Colombia que claman por la implementación de la paz y advirtió del advenimiento de días y semanas de trascendentales decisiones, en clara alusión al pronto vencimiento del fast track (vía rápida) para el trámite en el Congreso de proyectos de ley medulares para la paz.
En tal coyuntura, la FARC acentuó el llamado a la defensa de la paz en el Congreso, en el Gobierno, en las Cortes, por las iglesias, los sindicatos, organizaciones sociales y populares, estudiantes, organizaciones femeninas, la intelectualidad, la juventud y los partidos políticos que sueñan un país diferente.
Bogotá, 5 de noviembre 2017
Crónica Digital /PL
