Originarios y legítimos serán los actos previstos a partir de mañana y que representan la llegada a la primera magistratura de un líder de masas, quien demostró en las urnas contar con el respaldo de las mayorías marginadas durante décadas.
Sin embargo, el alcance de este acontecimiento es mucho mayor al convertirse en un hecho histórico, como el propio Morales consideró en un encuentro con la prensa.
Nunca antes, al menos así lo reconocen políticos y medios de difusión, existió un interés tal que ha llevado a la acreditación de más de mil periodistas.
Comenzaremos a hacer historia, expresó el dignatario electo al anunciar medidas como la creación de ministerios encargados de consolidar el rumbo popular, y las proyecciones de su gabinete, entre estas la necesidad de contar con carteras en los sectores de cultura y deportes.
Nos debemos al pueblo, al que le tenemos que servir, por eso insisto en la propuesta de denominar servidores a los ministros, comentó antes de reclamar a periodistas dejar de decirle presidente y, en cambio, mantener su condición de compañero.
En apenas horas, Morales asumirá el mandato otorgado de manera abrumadora por los bolivianos y ya el mundo se convence de su capacidad para conducir esta nación por un camino menos escabroso al recorrido por gobernantes neoliberales que lo convirtieron en uno de los más pobres de América Latina.
Conocimientos de la economía propia e internacionales sobresalen en sus intervenciones de las últimas semanas, con palabra valiente al identificar los problemas del país y los mecanismos requeridos para solucionarlos.
Todo lo contrario a lo que se pueda imaginar alguien fuera de Bolivia o en su propio interior, Evo llama a la prensa a acompañarlo en su difícil tarea, le pide sensibilidad a la hora de tratar temas complicados, pero, sobre todo, los mantiene a su alcance, con encuentros frecuentes.
Transparencia es una de las claves de su mandato, aunque quienes lo antecedieron han llegado incluso a ocultar detalles o documentos necesarios en el proceso de transición.
La reciente gira de Morales por varias naciones y la anunciada presencia de medio centenar de delegaciones de alto nivel en los actos del domingo dejan en claro el reconocimiento, el apoyo y la solidaridad internacional que ayudará a Bolivia, sentenció el líder popular ante una prensa.
Antes de la ceremonia constitucional, en esta capital, las autoridades originarias entregarán los atributos presidenciales a Morales en Tiahuanaku, mañana, mientras que la capitalina Plaza de San Francisco pretende convertirse en la ceremonia popular.
Por: Luis Enrique González, enviado especial.
La Paz, 20 de enero 2006
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