Se requieren urgentes cambios en el sistema de concesiones, de modo que no vuelva a ocurrir en Chile que una concesión otorgada por tiempo indefinido a una universidad, termine siendo operada por un empresario privado, cual es el caso de Chilevisión. Se requiere que las concesiones sean otorgadas con criterios técnicos y socioculturales y no sólo con criterios tecnológicos o financieros, dice un comunicado de prensa de esa colectividad.
Respecto a la norma que próximamente adoptará la TV digital en Chile, el PPD respalda la forma como el Gobierno ha realizado el proceso de debate, con transparencia y participación de los sectores implicados, y confiamos en que el diseño regulatorio que se adopte sea una oportunidad real para profundizar la diversidad y el pluralismo en TV abierta.
El partido de gobierno solicita que se anuncie la norma que adoptará, apenas terminan las pruebas técnicas a la mayor brevedad. Los requisitos que a nuestro juicio debe cumplir la norma son: a) que la regulación haga posible que nuevos operadores ingresen a la comunicación televisiva abierta, tales como municipales, privados y sociedad civil, b) el menor gasto para los televidentes.
Para el PPD el país necesita el desarrollo efectivo y autónomo de una televisión regional y local, que abran reales espacios a la diversidad identitaria de nuestro país; la TV digital abierta abre la oportunidad a dicho desarrollo, pues permite optimizar el espectro radioeléctrico y la existencia de un mayor número de operadores.
Para eso la colectividad llama a reflexionar respecto de la concentración que existe en Chile de los medios de comunicación y las pocas posibilidades de poder difundir opiniones distintas o mostrar los logros de diversos actores nacionales, regionales y locales.
Considerando los resultados del último estudio realizado por el Consejo Nacional de TV, que demuestra la opinión negativa de la ciudadanía sobre la calidad de la oferta programática de los canales, el PPD llama a reflexionar sobre la tendencias de la programación actual y el déficit de programas culturales, que son más difíciles de financiar vía publicidad comercial, apunta la misiva.
Sobre lo anterior, el Partido por la Democracia señala que una solución posible es que los programas de corte cultural y educativo no estén sujetos al financiamiento del mercado, sino que aumenten considerablemente los aportes estatales que aseguren una mejor difusión, considerando que el Estado gasta miles de millones de pesos anuales en subvencionar proyectos culturales cuya divulgación se circunscribe a círculos limitados. De este modo, no sólo avanzaríamos en pluralismo, sino también en mejorar el entorno cultural en que se desarrollan niños y jóvenes. Debemos reflexionar sobre un mayor aporte fiscal a la mejoría de nuestro medio ambiente cultural y educativo a través de la TV
Para ello, el PPD sostiene que tanto la Ley que rige a TVN, como la Ley del Consejo Nacional de TV deben modificarse para adecuarlas a los cambios tecnológicos, a la profundización democrática y al desarrollo cultural y científico. Dichas leyes se elaboraron en otro momento histórico, cuando la TV contaba con otra tecnología y no desempeñaba el liderazgo que hoy detenta.
La Ley de TVN debe modificar la composición de su Directorio, de modo que éste pueda reflejar más democráticamente las diversidades y pluralismos sociales y culturales y no sólo los político/partidarios. La TV pública debe poder recibir aportes estatales para su programación cultural y educativa. La ley debe contemplar mecanismos de supervisión y control público de su gestión programática, financiera y línea editorial en el cumplimiento de su misión por parte del Parlamento, finaliza la nota de prensa.
Santiago de Chile, 29 de julio 2007
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