La declaración está firmada por las organizaciones Fuerza Social y Democrática, Nueva Izquierda, Movimiento Surda y G-80, y por los dirigentes Nicolás Grau (FECH) Jorge Pavez (Colegio de Profesores), Sebastián Valdivia (FUTEM), Raúl de la Puente (ANEF), Rodrigo Pizarro (Fundación Terram), Claudio González (Federación Nacional de Profesionales de la Salud), Cecilia Ugalde (Asociación Nacional de Empleados Municipales de Chile), Gladys Corral (Colegio de Enfermeras), Fernando Medina (Aquí la Gente) y Tomás Fabres (Fundación Chile Ciudadano).
El texto afirma que «hemos coincidido en expresar públicamente nuestro respaldo a la iniciativa tomada por los parlamentarios Marco Enríquez-Ominami, Alejandro Navarro, Alejandro Sule, René Alinco y Nelson Avila, en cuanto a viajar a la hermana República de Bolivia y comenzar un intercambio abierto y transparente con parlamentarios de ese país».
Los líderes criticaron duramente a «quienes han defendido, especialmente desde la derecha, un modelo de explotación indiscriminada de nuestros recursos naturales para el enriquecimiento de las grandes empresas, (los cuales) no tienen autoridad moral para oponerse a la amistad y una integración justa con Bolivia a nombre de una falsa defensa a la soberanía, pues han sido precisamente ellos quienes han puesto en manos de grandes compañías lucrativas el control de la mayor parte de nuestro territorio nacional».
Los dirigentes sociales finalizaron valorando «profundamente la voluntad mostrada en los hechos por estos parlamentarios, porque consideramos de la mayor importancia avanzar sin dilaciones en pos de una integración justa entre los pueblos boliviano y chileno».
Santiago de Chile, 16 de junio 2006
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