Los canales de televisión y radios capitalinas están informando desde madrugada, la salida de los usuarios y de las maquinas que los transportan a sus lugares de trabajo o estudios.
Este lunes se reincorporaron a sus escuelas más de 400 mil estudiantes y retornan masivamente miles de vehículos de santiaguinos que se encontraban veraneando fuera de Santiago.
Desde muy temprano se ha podido ver aglomeraciones, tranques, demoras y, en general, malestar hacia el nuevo sistema, que ha sido objeto de las mayores polémicas a lo largo del verano que termina.
En las últimas semanas, el sistema fue puesto a prueba y, luego de protestas y críticas, sometido a numerosos ajustes y rectificaciones, que obligaron a la Presidenta Michelle Bachelet a recortar sus vacaciones para monitorear el proceso en detalle.
Para la «prueba de fuego» de hoy, el Gobierno diseñó seis medidas de contingencia, con las que busca reducir los problemas y brindar un servicio eficiente a la población.
Entre otras disposiciones, las autoridades anunciaron una mayor fiscalización de las micros en horario nocturno, un ajuste de recorridos, más buses que conectan con el metro y más monitores en las calles.
El ministro de Transportes, Sergio Espejo, afirmó la víspera que se concentrará en las empresas del servicio nocturno, que fue deficitario en las semanas pasadas.
Desde temprano se ubicaron 781 monitores en 44 puntos críticos de Santiago, para distribuir mapas de recorridos y volantes informativos.
Santiago de Chile, 5 de marzo 2007
Crónica Digital/PL , 0, 20, 20
