Son las mujeres las que más sufren la tragedia de la violencia doméstica, el tráfico de personas, la prostitución forzada y el VIH/SIDA, expresó el embajador cubano, Rodrigo Malmierca, ante un debate sobre el tema en la Asamblea General.
Intitulado Promoción de igualdad de género y empoderamiento de la Mujer, este encuentro de dos días coincide con la celebraciones del 51 período de sesiones de la Comisión sobre la Condición Jurídica de la Mujer, iniciado la semana pasada.
En su discurso, Malmierca expresó la importancia histórica de la IV Conferencia sobre la Mujer celebrada en Beijing, pero dijo que no es posible validar su agenda en el actual e injusto orden internacional, marcado por la globalización neoliberal.
Esa globalización, subrayó el diplomático, no solo perpetúa y amplía la brecha entre ricos y pobres, sino que arrastra consigo el humillante lastre de la feminización de la pobreza.
Malmierca recordó que unos 17 millones de mujeres y niñas de 15 años o más viven con el VIH/SIDA y representan el 48 por ciento del total del mundo, mientras en Africa Subsahariana tres de cada cuatro jóvenes de 15 a 24 años portadores o enfermos son mujeres.
Las mujeres representan también el 60 por ciento de los pobres del mundo y los dos tercios de sus analfabetos, añadió.
Al respecto aseguró que «sin una firme voluntad política no será posible hacer realidad los trascendentales compromisos en materia de adelanto de la mujer».
Apuntó que los esfuerzos nacionales, especialmente en los países en desarrollo, necesitan la complementación de la cooperación internacional.
Esa colaboración, dijo el Embajador, debe ser justa y equitativa, basada en un clima de respeto a la soberanía, la independencia, la libre determinación de los pueblos y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados.
Al hablar en este debate, el diplomático se refirió a la lucha en su país contra la discriminación por motivos de género y al avance en el empoderamiento de la mujer, lo cual coloca a Cuba con resultados importantes, que superan metas internacionales.
Las cubanas constituyen hoy el 46 por ciento de la fuerza laboral en el sector estatal civil, el 66,6 por ciento de los técnicos y profesionales del país y el 48,9 por ciento de ellas trabajan en instituciones de ciencia y técnica.
En la esfera política, la cantidad de mujeres en el Parlamento (35,96 por ciento) ubica a Cuba en el séptimo lugar en el mundo por el número de diputadas, mientras son la mayoría de los graduados universitarios (63,3 por ciento), de los jueces y los fiscales.
El representante permanente de Cuba en las Naciones Unidas destacó que las mujeres de su país participan activamente en los proyectos de cooperación establecidos con numerosos países en desarrollo de Africa, Asia y América Latina.
Dijo que esos esfuerzos de Cuba fueron reconocidos en agosto pasado cuando el país presentó informes ante el Comité de Expertos de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer.
Todos estos avances indiscutibles han sido alcanzados a pesar de las consecuencias del injusto y unilateral bloqueo económico, comercial y financiero que el gobierno de los Estados Unidos ha impuesto a Cuba, expresó Malmierca.
Dijo que ese bloqueo constituye la mayor forma de violencia contra las cubanas.
«Una violencia que no es sólo física y material, sino también psicológica, que ha mantenido a las mujeres cubanas y a todo el pueblo cubano en general, bajo una permanente amenaza militar», agregó.
El diplomático apuntó que frente a esa política hostil, «Cuba ha demostrado cuánto es capaz de hacer una nación pequeña y pobre cuando existe una real voluntad política para hacer realidad los derechos de las mujeres y las niñas».
Afirmó que el cumplimiento de los acuerdos de las conferencias y cumbres mundiales, y particularmente de la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer y la implementación de la Plataforma de Acción de Beijing se mantendrán como objetivos permanentes de Cuba.
Naciones Unidas, 7 de marzo 2007
Prensa Latina , 0, 65, 8
