Ediciones B presenta HOY la biografía de referencia de Salvador Allende, disponible ya en todas las librerías chilenas.
A lo largo de 681 páginas, el historiador y periodista español Mario Amorós relata de manera minuciosa la trayectoria política y humana de Salvador Allende, desde la llegada de sus antepasados a Chile en el siglo XVII hasta el 11 de septiembre de 1973. A partir de una abundante documentación inédita hasta ahora, ilumina muchos episodios, incluso periodos completos de su vida, totalmente desconocidos.
Es un libro que va mucho más allá del mito, que nos habla de su infancia y sus años estudiantiles, de su incorporación al PS y a la masonería, de su trabajo como médico en Valparaíso, de su labor como diputado, ministro y senador, de sus viajes por el mundo, de sus nueve campañas electorales, de su papel como Presidente de la República. Los testimonios de sus familiares, compañeros y amigos perfilan, además, una cuidada semblanza de su personalidad.
El lanzamiento tendrá lugar el miércoles 4 de septiembre, a las 19.30 horas, en la Biblioteca del GAM (Alameda, 227), en Santiago. El precio de venta en las librerías es de 17.000 pesos. Hoy en el lanzamiento será de 15.000.
Santiago de Chile, 4 de septiembre 2013
Crónica Digital
Mié Sep 4 , 2013
Son muchos los temas que se pueden abordar echando una mirada a los sucesos ocurridos entre 1970 y 1973 que culminaron con el golpe de Estado del 11 de septiembre. Nadie podrá negar que las miradas se enmarcan en un contexto ideológico y de allí que existan divergencias, aunque haya que insistir en que la veracidad histórica y la documentación objetiva no se puede desechar de cualquier reflexión. Lo ocurrido ese día martes hace 40 años y todo lo que trajo para el país, no se puede abordar o querer finiquitar con actos mediáticos o declaraciones de buena crianza. La posibilidad de reencuentro o de reconciliación se debe fundar, necesariamente y como lo establecen preceptos judiciales internacionales y de Naciones Unidas, en acciones de las instituciones del Estado (Poder Judicial, Ejecutivo y Fuerzas Armadas) y en acciones de distintos actores políticos, sociales e intelectuales. El reconocimiento de los hechos punibles por los responsables y el arrepentimiento deben preceder al perdón y el reencuentro. En ese camino aparecen odiosas las tesis “del empate” o de que “todos fuimos responsables del Golpe”. Podemos asumir las responsabilidades de logros y errores en el periodo del gobierno de la Unidad Popular, pero la responsabilidad del Golpe de Estado no es atribuible a todos. Y mucho menos querer establecer “empates” de responsabilidades ante las ejecuciones, desapariciones, torturas, detenciones ilegales y exilio de cientos de miles de chilenas y chilenos. Frente a las circunstancias que se vivían en 1973, el Presidente Salvador Allende, sus ministros, algunos personeros democratacristianos, fuerzas democráticas, la Iglesia, actores sociales y del mundo intelectual, y un segmento de los altos mandos de las Fuerzas Armadas y policiales, hicieron las gestiones y plantearon las opciones para una salida democrática, pacífica y constitucional a los difíciles momentos que se vivían. De hecho, el Presidente Allende ya había tomado la decisión de convocar a un plebiscito para que la ciudadanía decidiera sobre los pasos a seguir e incluso si él debía continuar o no en la Presidencia de la República. Pero la derecha, oficiales golpistas, sectores del empresariado, entre ellos los representantes de la prensa mercurial, y el gobierno de Estados Unidos en manos de Richard Nixon y Henry Kissinger, optaron por otro camino y no dieron espacio ni aprobación a las salidas institucionales y pacíficas y decretaron que había que derrocar al gobierno constitucional y provocar una asonada militar, lo que fue facilitado por la postura del sector más opositor de la DC. Se impuso una alternativa anticonstitucional desarrollada por la vía violenta. Es difícil que estos actores puedan negar hechos que están documentados por el Senado estadounidense y otras instituciones nacionales y extranjeras. Esos son los hechos globales. Por lo demás, en aquellas circunstancias, como en otras a lo largo de 100 años, jamás el Partido Comunista optó por romper la institucionalidad, pasar por encima de la Constitución o buscar una salida de ruptura. Por esa postura, el PC fue criticado por sectores de izquierda. Cosa distinta fue el supremo esfuerzo que se hizo por terminar con la dictadura de Augusto Pinochet, que persiguió de manera genocida a partidos políticos, organizaciones sociales y a gran parte de las chilenas y los chilenos. Y se hizo apelando al derecho a rebelión contra una […]
Me imagino que esta biografía es solo una manipulación de la historia,donde se muestra a un comunista como un salvador y gobernador honorable..pero en realidad solo fue un asesino y sucio cerdo al igual que Fidel Castro . Donde contaba con su propio grupo de matones que era el G.A.P. y que ingresaba armamento de Cuba para armar a civiles y a campesina para convertirlos en marionetas y destruir a Chile….En lo personal » yo mataría comunistas por salvar a Chile».