La cúpula militar ucraniana persiste en la confrontación fratricida con saldo de miles de víctimas civiles, mientras el flamante presidente Piotr Poroshenko habla de paz sin decretar un alto al fuego, afirmó hoy Alexander Borodai, uno de los dirigentes populares.
En su primera reunión como gobernante Poroshenko manifestó la «necesidad de un cese el fuego en las regiones orientales esta semana», sin embargo, los líderes populares de Donetsk y Lugansk se muestran escépticos ante el recrudecimiento de los ataques del Ejército y de la Guardia Nacional.
Contrario a la proclamada intención, el ministro de Interior, Arsén Avakov, anunció este lunes que todas las tropas subordinadas a él participarán en la operación militar-policial a gran escala que llevan a cabo las fuerzas de Kiev desde mediados de abril contra las regiones rebeldes.
Todas las agrupaciones de combate del Ministerio de Interior y las patrullas participarán en la operación, aseguró Avakov en su blog de Facebook.
También desde el Ministerio de Defensa, el general Alexander Rozmaznin anunció que en los próximos días las tropas recibirán nuevos equipos de combate.
Ante las cámaras de la televisión ucraniana Rozmaznin dijo que en las zonas donde se realizan las acciones bélicas se incrementarán el grado de protección y compensación monetaria a los efectivos.
Mientras tanto, representantes de la proclamada República Popular de Donetsk denunciaron la violación por parte de Avakov de una tregua negociada por las partes ayer.
Dijo el primer ministro de la nueva entidad, Alexander Borodai, al Primer canal de la televisión rusa que la ciudad de Slavyansk fue blanco del ataque más potente en todo el período de confrontación, con golpes de artillería pesada sobre los sectores residenciales.
Hay muertos, incluidos niños, de la zona peligrosa no se pueden evacuar los heridos y en la ciudad sitiada no hay agua, electricidad, no alcanzan el combustible y los alimentos, afirmó Borodai.
Al menos una niña de cinco años y un adolescente de 13 figuran entre los muertos a causa de los bombardeos en las últimas horas, según las milicias populares.
La Guardia Nacional hostiga de manera permanente los vecindarios con morteros y obuses, según los reportajes de las televisoras rusas.
De acuerdo con la vocera del alcalde popular de Slavyansk, Stella Jorosheva, las fuerzas militares ucranianas reanudan periódicamente los ataques de artillería sobre la ciudad y localidades aledañas.
En Rusia, el plenipotenciario de los derechos humanos en la Cancillería, Kontantin Dolgov, instó hoy a la comunidad internacional a influir sobre las autoridades ucranianas para poner fin a la operación de castigo y las muertes de civiles.
Dolgov declaró al canal Rossia 24 que el Ministerio de Asuntos Exteriores planea la culminación en los próximos días de la labor de actualización del Libro Blanco sobre las violaciones de los derechos humanos en Ucrania.
Agregó el diplomático que la negación de que las personas huyen atemorizadas por la guerra tiene el fin de justificar sus propias acciones, y por supuesto, es parte de la guerra informativa, subrayó el embajador especial.
Kiev, 9 de junio 2014
Crónica Digital / PL
