Fernanda Sandoval acudió al Hospital de Quilpué con un sangramiento y contracciones producto de un embarazo de 15 semanas de gestación, donde solicitó la práctica de la interrupción del mismo. Sin embargo, los médicos que la recibieron se opusieron haciendo uso de la nueva norma que posibilita la objeción de conciencia, impidiendo la realización del tratamiento correspondiente y dejando en la indefensión a Fernanda.
La Senadora por la Región de Valparaíso, Isabel Allende B., manifestó su indignación por el trato dado a esta mujer y reiteró sus aprensiones que había expresado cuando el Tribunal Constitucional aprobó esta nueva normativa: “Tal como lo dijimos, esta primera situación acaecida en un hospital público como el de Quilpué demuestra cómo se comienza a vulnerar los Derechos de las Mujeres, en un tema tan doloroso y por el cual luchamos tanto”.
La parlamentaria socialista destacó que “es muy grave que se produzcan este tipo de situaciones en cualquier hospital público o recinto privado, ya que cuando una mujer acude -como en este caso- a solicitar que se ejerza la ley para proteger su vida, no es posible que se encuentre con este tipo de respuestas, especialmente cuando es un servicio público”.
Finalmente, la Senadora Allende planteó que “el fallo del TC está revirtiendo una ley que aprobamos por mayoría y perjudicando directamente a las mujeres que se ven afectadas por situaciones tan dramáticas como la vivida por Fernanda Sandoval”.
Santiago de Chile, 29 de abril 2018
Crónica Digital
