Fidel formuló la declaración en el espacio televisivo Mesa Redonda, dedicado al análisis de los artículos de Forbes en los que, desde hace más de un lustro lo incluye en su lista anual de gobernantes millonarios, asignándole, en su última y reciente edición, una fortuna de 900 millones de dólares.
A la vez que refutó los artículos de la publicación, el líder cubano denunció que estos forman parte de una campaña de Washington para calumniar y desprestigiar no sólo a su persona, sino también a la Revolución, en un vano intento para opacar, frenar y finalmente destruir la obra revolucionaria del pueblo cubano.
Esto no lo para nadie ya, afirmó, luego de referir cómo va quedando atrás la grave crisis económica en que se sumió Cuba tras la desaparición de la Unión Soviética y del campo socialista europeo, y el recrudecimiento del bloqueo de los Estados Unidos, y recordar que la Isla obtuvo en el 2005 un crecimiento del 11,8% de su producto interno bruto, y que este año ese indicador será superior al 12%.
En la propia dirección mencionó también la Revolución Energética que desarrolla el país, a la que calificó como una de las cosas más trascendentales que está haciendo hoy, que ayudará a la especie humana. Si todos hacen lo que estamos haciendo, significó, los hidrocarburos podrán durar el doble, la contaminación ambiental se reducirá a la mitad, la economía mundial recibirá un alivio, y se podrá proclamar una moratoria al inicio de nuevas plantas nucleares generadoras de electricidad, por quince años al menos.
Entre las perspectivas que pretende impedir la campaña en que está involucrada Forbes contra la Revolución, se refirió igualmente a los gigantescos proyectos de colaboración con otros países que realiza Cuba en la esfera de la salud, y que incluyen a más de 25 mil médicos cubanos que prestan servicio en países del Tercer Mundo, y a los programas para formar 100 mil médicos y operar de la vista a cinco millones de enfermos en la región latinoamericana y caribeña en los próximos años.
Han tratado de destruir la Revolución durante casi medio siglo, de matarnos a todos nosotros, nos han bloqueado y todavía estamos bloqueados, y no han podido, refirió Fidel, vaticinando el fracaso de la campaña de descrédito que mantiene la publicación en cumplimiento de los planes de la Casa Blanca contra Cuba.
Yo los emplazo a que prueben esto que han dicho, a que lo prueben, afirmó el Presidente cubano. Se metieron en las patas de los caballos, en la mentira absoluta, agregó, y precisó: Ahora ellos tienen la palabra.
Por: Haroldo Romero Pérez desde La Habana, Cuba.
Santiago de Chile, 16 de mayo 2006
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