Un equipo de investigadores de la Universidad de Maastricht, Holanda, llegó a esa conclusión tras estudiar los hábitos dietéticos de 120 mil personas.
Durante el estudio encontraron que las mujeres que consumen alimentos fritos u horneados, tienen mayores probabilidades de padecer enfermedades oncológicas.
Las comidas fritas o asadas, generan acrilamidas sustancia química.
El estudio desarrollado por investigadores de, difundida en la revista Cancer Epidemiology, Biomarkers and Prevention, es el primero que encuentra un vínculo entre las acrilamidas y el riesgo de cáncer.
Los investigadores siguieron a los 120 mil voluntarios, de los cuales 62 mil pertenecen al sexo femenino. Después de 11 años de ser interrogadas sobre sus hábitos alimentarios 327 desarrollaron cáncer de endometrio y 300, cáncer de ovario.
Durante el estudio los científicos encontraron que las personas que consumen 40 microgramos de acrilamida al día, presentaban dos veces más riesgo de sufrir cáncer que los que ingerían alimentos con una menor concentración de ese químico.
Aunque el estudio involucró a un gran número de personas, los expertos indicaron que sus resultados deben ser confirmados con otras investigaciones.
Londres, 3 de diciembre 2007
Prensa Latina , 0, 44, 10