El acuerdo fue suscrito durante la 28 versión del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, una de las fiestas del séptimo arte más importantes de América Latina y el Caribe, agrega el texto.
Cita al director de Asuntos Culturales de la cancillería, Emilio Lamarca, en el sentido que «los gobiernos de Chile y Cuba entienden este Acuerdo como una contribución al desarrollo de la industria de ambos países», que además abre las puertas a producciones de naciones del Tercer Mundo.
Lamarca suscribió el Acuerdo con Omar González, presidente del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), de Cuba, señala el comunicado.
En el convenio, firmado luego de tres años de trabajo conjunto, quedó estipulado que ambas partes «gozarán de las ventajas previstas para las obras nacionales por las disposiciones legales vigentes o por las que podrán ser dictadas en cada Estado coproductor».
El acto contó con la presencia de autoridades cubanas y miembros de la delegación chilena, integrada por figuras como los directores Rodrigo Sepúlveda, Erwin Gómez, Tomas Welss, Oscar Cárdenas y Martín Rodríguez.
Asimismo, por los actores Jaime Vadell, María José Prieto, el director y actor Boris Quercia, y Carmen Brito, restauradora de la Cinemateca Nacional.
Por otra parte, el comunicado informó que Chile tuvo una «marcada e importante presencia» en el certamen habanero, con la exhibición de más de 10 obras audiovisuales (cortometrajes, largometrajes, animación y documentales).
Entre ellas destacaron Padre Nuestro, de Rodrigo Sepúlveda; Rabia, de Oscar Cárdenas; Pecados, de Martín Rodríguez; El Rey de los Huevones, de Boris Quercia; Kiltro, de Ernesto Díaz; Rojo «La película», de Nicolás Acuña, y Play, de Alicia Scherson.
También sobresalió Siaskel, de Erwin Gómez, mientras Arcana, de Cristóbal Vicente, y Pasta, de Tomas Welss, fueron premiadas en el Festival.
Santiago de Chile, 20 de diciembre 2006
Crónica Digital/PL , 0, 104, 9