Violeta Parra Sandoval, folklorista, artista textil y pintora. Nació en San Carlos en la provincia de Ñuble, Chile, el 4 de Octubre de 1917 y falleció en Santiago en 1967.
Su padre era profesor de música y su madre una campesina de oficio modista que gustaba del canto y la guitarra. Formaron una numerosa familia con nueve hijos cuya infancia transcurrió en el campo.
El centro cultural el Sindicato comienza en Santiago una serie de actividades en su recuerdo y con es poema la rememora:
«… Porque tú no te vistes de payaso,
Porque tú no te compras ni te vendes.
Porque hablas la lengua de la tierra,
Viola chilensis. »
LaTribu Generaciones, será el primer grupo que homenajeará con su estilo de fusión de rock y folclor a la Violeta Parra, Madre de la Música Chilena, especialmente en este año en que las luchas y demandas de los trabajadores cobran fuerzas motivados por el espíritu valiente de los que entregaron su vida en Iquique hace un siglo.
El canto de Violeta recobra nueva vida en este sentido ya que busca la toma de conciencia y la movilización para obtener lo que es realmente del pueblo… La Libertad y la Dignidad.
El homenaje será en:El Sindicato Social & Cultural Maipú # 424 – Barrio Yungay
Sábado 03 de Febrero, 10:30 PM Aporte Cultural Voluntario
BIOGRAFÍA DE VIOLETA PARRA
A los nueve años Violeta Parra se inició en la guitarra y el canto y a los doce años compuso sus primeras canciones. Sus estudios primarios los realizó en las ciudades de Lautaro y Chillán y en 1934 ingresó a la Escuela Normal de Santiago a recibir la formación como maestra. En esa época ya componía boleros, corridos y tonadas, y trabajaba en circos, bares, quintas de recreo y pequeñas salas de barrio.
A los 21 años se casó con Luis Cereceda, ferroviario. De este matrimonio nacieron sus hijos Isabel y Angel, con los cuales más tarde realizó gran parte de su trabajo artístico musical.
A partir de 1952, impulsada por su hermano, el poeta Nicanor Parra, comenzó a recorrer diferentes zonas rurales, investigando y recopilando poesía y el canto popular de los más variados rincones del país, experiencia que sin duda repercutió en su sentir artístico y que se plasmaría visiblemente en sus obras plásticas.
Entre los años 1952 y 1953 elaboró una síntesis de la cultura popular chilena e hizo emerger una tradición hasta entonces escondida, transformándose en una recuperadora y creadora de la cultura de América Latina. En estos años, durante una enfermedad que la mantuvo un largo tiempo en cama, se inició como arpillerista. Incursionó además en la cerámica y en la pintura.
Entre los años 1955 y 1959 recorrió Europa y asistió a distintos encuentros y festivales de música folclórica. Realizó una serie de viajes a la Unión Soviética, Finlandia, Alemania, Italia y Francia. En estos años compuso piezas musicales, grabó numerosos discos, programas de radio y televisión y realizó conciertos y muestras de su obra plástica en distintos escenarios de Europa y América Latina. Se destaca la exposición individual de sus arpilleras y óleos realizada en 1964 en el Pavillon de Marsan del Louvre de París, logrando ser la primera artista latinoamericana que exhibió sus obras en el famoso Museo.
En 1965, de regreso en Chile, instaló una carpa en la comuna de La Reina creando un Centro de Folklore y Arte Popular.
Sus obras conforman el patrimonio de la Fundación Violeta Parra, creada por sus herederos con la finalidad de rescatar, preservar y difundir la creación plástica y escrita de esta artista del pueblo, que logró la universalidad a través de su arte.
Con fecha 2 de Septiembre de 2003, en el Palacio Consistorial de la I. Municipalidad de Santiago, se firmó un convenio para la realización del Museo Violeta Parra, suscrito por el Alcalde de Santiago, el Presidente de la Fundación Cardoen y la Presidenta de la Fundación Violeta Parra.
ESTRATEGIA VISUAL
La obra plástica de Violeta Parra está principalmente conformada por arpilleras y óleos sobre tela, madera y cartón, que fueron creados por la artista durante los años 1954 y 1965 en las ciudades de Santiago de Chile, Buenos Aires, París y Ginebra.
Los temas de estas obras son aspectos cotidianos como la familia, recuerdos de infancia, pasajes de nuestra historia y personajes populares, entre otros, siempre enmarcadas en su interés por recuperar y recrear la cultura popular de América Latina.
Santiago de Chile, 1 de febrero 2007
Crónica Digital , 0, 52, 9