El pretendido «pleno empleo» del gobierno, vuelve a indicar el trato de exclusión y de corte racista que existe para las zonas de más alta población Mapuche. ¡La Cesantía es sobre 10% para hombres y 11% para mujeres! Además de ser salarios sin derechos ni beneficios laborales. Ver: http://www.biobiochile.cl/2013/05/31/la-araucania-lidera-indice-de-desempleo-segun-ultimo-informe-del-ine.shtml El pueblo Mapuche es alrededor del 10% de la población nacional, es decir, sobre un millón y medio de personas, cifra que el Estado esconde.
La represión contra el Mapuche continúa: En Costa Rica acaba de terminar (sin veredictos todavía) de la querella contra el Estado chileno (por violaciones cometidas por todas las administraciones post Pinochet y la dictadura incluída). El juicio es por las violaciones a los derechos humanos y las condenas hechas a un amplio número de presos políticos Mapuche. Todos fueron acusados con montajes, usando testigos protegidos (falsos, delincuentes y los propios meimbros de la policía que se prestaban para ser víctimas y testigos.) El daño sufrido por los Mapuche, las condenas cumplidas, la tortura a la que fueron sometidos no tiene nombre y debe ser juzgado y se debe reparar ese daño. Estos Mapuche habían sido sobreseídos inicialmente, por falta de evidencias. Pero, los poderosos usaron apelaciones que las Cortes, en colusiónn con ellos, aceptó, sin otras pruebas, condenándolos a penas inmorales que les destruyen sus vidas. comunidades y familias. ¿Habrá Justicia para ellos?
En ese Chile se reprime para mantener el estado de lucro de unos pocos. El menor Gabriel Valenzuela Montoya sigue en la cárcel de menores de Chol-Chol, acusado por «Robo y Homicio» sin evidencia alguna, y junto con otros dos ex-menores que estuvieron también en la cearcel de menores y ahora, ya mayores, son igualmente acusados por el mismo delito con el que no tienen relación ninguna. Se los acusa con esa monstruosa acusación para mantenerlos presos, y así no usar la Ley Anti-Terrorista de la dictadura que sigue en pie. . Otros presos, como el joven Eliseo Ñirripil, a quien visité en la cárcel de Temuco, que ha sido torturado (foto), es mantenido detenido sin juicio desde el año pasado… Foto de denuncia de la Comisión Ética Contra la Tortura (http://www.mapuexpress.net/images/news/21_5_2013_16_33_19.jpg ) Pero a él se le juzga por la (in) Justicia Militar, que siempre absuelve a sus delincuentes uniformados.
¿A quienes benefician la represión y las leyes actuales?
El mundo identifica que Chile no dice la verdad y que pretende ser lo que no es. Ya se le enrostró en el Parlamento Europeo, el anno pasado por la Parlamentaria gallega, Ana Miranda. La Constitución y su sistema electoral, hechos en dictadura y reforzados en esta dictadura legal, son una verguenza que solo permite mantener el modelo de la dictadura y el beneficio a los Piñera, Paulmann, Matte, Larrain, Angelini, Luksci, Falabella y otros tiburones de la fauna financiera que va desde las pirañas hasta los que rapiñan el país desde el interior y exterior. Mientras tanto, el Estado mantiene una «guerra sucia».
«La visita» de Stephen Harper, Primer Ministro canadiense, a Chile, (mientras su gobierno estaba en medio de un escándalo de fraude de su propio partido, el Consevador), y la de Piñera a Canadá, esta semana, son solo medidas para asegurar que las empresas mineras que invierten en Chile (mayoritariamente en manos de Canadá) mantengan priviliegios inmorales (Pascua Lama, GoldCorp y otras) y las de los magnates chilenos como Luksic. Esos privilegios aseguran que la Salud, Educación, Protección Social, Pensiones y salarios signa siendo miserables y fuentes de fortunas de los que se sienten duennos del país. Y sobre eso hay que poner la nueva Ley maldita (Ley Hinzpeter de represión adicional y a favor de los abusos de Carabineros y Policía Civil PDI) hecha para asegurar la mantención de un Chile inmoral. Canadá se como gobierno, pese a la insistencia de su pueblo, se ha negado a que las inversiones canadienses mantenga un código de respeto a los derechos de los pueblos donde se invierta. Harper mismo lo ha rechazado.
¿Es este el Chile que Piñera representa en Canadá y el mundo? O, como lo conocemos, ¿mantiene su postura de ser parte de un país moderno y transparente? Lo que no dice son las permanentes violaciones a los derechos humanos y ciudadanos que su gobierno hace y las leyes criminales que promueve para mantener la represión y los beneficios personales y de sus cómplices magnates. Entre otros, el derecho a manifestarse, a disentir y a exigir sus demandas justas y democráticas. En Chile la democracia es una farsa legal.
Los pueblos de Chile y la sociedad civil exigen justicia, equidad y respeto a sus derechos.
Los gobiernos del mundo, las organizaciones de derechos humanos y la sociedad civil deben apoyarlos. Ahora.
Dr. José Venturelli
*Miembro, Comisión Ética Contra la Tortura (Secretariado Europeo)
*Vocero Internacional del Departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico de Chile
*Profesor Emérito, Facultad de Ciencias de la Salud, McMaster, University – Hamilton, Ontario – Canada.
Santiago de Chile, 1 de junio 2013
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