«El tema de fondo es el déficit de médicos y falta de especialistas», aseveró el Diputado Lautaro Carmona (PC), esta mañana durante la discusión sobre el proyecto de ley que establece los incentivos remuneracionales para los profesionales de los servicios de salud. La iniciativa, que se encuentra en su primer trámite institucional y se discute con suma urgencia, responde a una serie de acuerdos entre el Ministerio de Salud y diversos gremios del sector la salud, entre los que se cuentan el Colegio Médico, de Químicos Farmacéuticos y de Dentistas solamente. Sin embargo, no incluye a los profesionales no médicos agrupados en la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud, FENPRUSS. Con estos profesionales de los Servicios de Salud, si bien se firmó un «Protocolo de acuerdo» que les otorga una «Asignación por permanencia profesional» y otra «Asignación por trato al usuario», este protocolo aún no se traduce en un proyecto de ley que la concrete.
«Una iniciativa que vaya en la dirección de promover incentivos para que más profesionales médicos estén vinculados al ejercicio profesión en las regiones de nuestro país, siempre nos parecerá una medida a estimular. Sin embargo, es evidente que las mismas medidas propuestas para los médicos, químicos farmacéuticos y odontólogos deben extenderse a los otros profesionales de la salud, que también son necesarios en el servicio público. De lo contrario, el Estado de Chile continuará sin poder garantizar la igualdad de condiciones que requieren sus habitantes en el plano de la salud pública. Especialmente en las regiones», aseveró el diputado Carmona.
Según el parlamentario, sería una buena señal que el Ministerio de Salud, cumpla su compromiso y antes de terminar este período presidencial envíe un proyecto en esta línea, que incluya a otros profesionales de la salud además de médicos, Químicos Farmacéuticos y Dentistas.
El propósito de la iniciativa que actualmente se tramita en el parlamento consiste en mejorar las condiciones remuneracionales de los profesionales funcionarios que ejercen funciones de jefes de servicios clínicos y unidades de apoyo; incentivar la permanencia de profesionales especialistas en los servicios o unidades críticas, de urgencia, maternidades y residencias médicas, que requieren atención en forma continua los 365 días del año en hospitales; disminuir la brecha de especialistas en regiones carentes de especialidades médicas de las unidades señaladas; generar un estímulo de carácter permanente por especialidad y variable orientado al cumplimiento de metas de producción y calidad en dichas unidades de trabajo y, por último, establecer un plan de retiro voluntario para los profesionales pertenecientes a las leyes N° 19.664 y N° 15.076.
Por Javiera Olivares Mardones
Santiago de Chile, 29 de agosto 2013
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