La fiscal Viviana Fein, quien investiga la muerte del procurador Alberto Nisman, desmintió hoy que existiera un borrador de la denuncia que hizo el occiso contra el Ejecutivo como publicó la prensa opositora.
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Los diarios Clarín, La Nación, el servicio Infobae y los canales 13 y Todo Noticia insistieron con gran estridencia mediática el domingo que fue hallada una versión de la imputación de Nisman en el cesto de la basura de su apartamento en la que pedía el arresto de la Presidenta.
En un fuerte desmentido, Fein negó que se hubiera encontrado borrador alguno, y recalcó que «no figura en el expediente algún registro de los aludidos en los artículos publicados».
Los medios opositores también mintieron al informar que en las fojas de la denuncia en poder del juzgado del magistrado Ariel Lijo estaban tachadas las partes referentes a la indagatoria y detención de la mandataria.
El propio juez Lijo desmintió anoche tales falsedades, y hoy el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, fustigó duramente a Clarín y los medios afines, e incluso rompió en cámara un ejemplar de ese periódico, un abierto enemigo del Gobierno.
Por su parte, el secretario General de la Presidencia, Aníbal Fernández, criticó la operación mediática sobre una supuesta segunda denuncia y calificó al exdirector de Operaciones de Contrainteligencia Antonio Stiusso de personaje siniestro.
Stiusso quien guió y suministraba la información a Nisman, según se reporta, para que acusara a Irán del atentado en 1994 a la asociación judía AMIA, fue apartado del cargo en diciembre junto a la cúpula y los cabezas de departamento de la Secretaria de Inteligencia.
La decisión la tomó Cristina Fernández para reajustar la dirección de ese organismo, y comentaristas argentinos defienden la hipótesis de que la insólita denuncia de Nisman es una venganza de esos servicios secretos.
Aníbal Fernández declaró que «después de la muerte del fiscal aún sin esclarecer sale el tema de esta denuncia de Clarín que es ridícula, bochornosa»
Y respecto a Stiusso dijo que después de la decisión de la mandataria de desplazarlo, Stiusso «ha tratado de perjudicar al Gobierno, de ponerle palos en la rueda».
Según trascendió, ese oficial secreto entregó las últimas grabaciones a Nisman y salió del país.
Prensa Latina
Crónica Digital, 2 de Febrero 2015
