La acción judicial se presentó en Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, por el intendente Víctor Barrueto, junto al presidente de la CUT, Arturo Martínez, en la oportunidad Martínez dijo a la prensa que la multisindical no se hará responsables de los daños provocados por encapuchados, pero que se ha sumado a la acción judicial como una manera de expresar su repudio por los serios incidentes.
En tanto, Barrueto señaló que «tenemos hartas imágenes esta vez por suerte. Vamos a estar encima de esa querella, colaborando con la fiscalía hasta lograr sanciones. Vamos a solicitar imágenes tanto a los distintos canales, como a Carabineros y la Unidad de Control de Tránsito».
Ayer, unos 300 jóvenes encapuchados rompieron vidrieras y lanzaron piedras contra el Palacio de La Moneda y el ministerio de Educación, durante una multitudinaria marcha por el Día Internacional del Trabajo.
Según pudo constatar Crónica Digital, El primer foco de violencia se produjo frente a la sede del Ejecutivo, cuando un grupo de manifestantes intentó apedrear el recinto, pero los desórdenes más violentos se registraron en las intersecciones de las calles Santa rosa y Alameda.
Como en ocasiones anteriores, la marcha convocada por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) se inició con tranquilidad en la intersección de la Alameda con Plaza Los Héroes, pero el ambiente se fue tornando violento en la medida que miles de personas se sumaban.
Próximo al Palacio de La Moneda, sede del gobierno, un grupo fue interceptado por la policía cuando trataron de acercarse para lanzar piedras, pero lograron destruir un puesto de venta de comida rápida (Burguer King), ubicado cerca de la Plaza Constitución, según reportó la agencia de noticias Prensa Latina.
Luego en la intersección de Alameda con Santa Rosa, los desconocidos derribaron las barreras de contención, produjeron destrozos a los locales comerciales cercanos e incluso un fotógrafo de la agencia Associated Press resultó herido en un ojo.
También en ese sector los manifestantes quemaron una bandera chilena, e hicieron fogatas antes que efectivos de Carabineros utilizaron carros lanzaaguas y bombas lacrimógenas para disolver a los encapuchados.
Una vez terminadas las palabras centrales del presidente de la CUT, Arturo Martínez, un representante de los pueblos indígenas subió repentinamente hasta el escenario para exigir el cese de las persecuciones y la discriminación.
Pese a los incidentes, relativamente menores que en años anteriores, más de 60 mil personas participaron en la combativa marcha, donde los trabadores exigían más democracia y menos desigualdad social.
Santiago de Chile, 2 de Mayo 2006
Crónica Digital
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