La Agrupación de Padres y Amigos de Niños Discapacitados (PANDIS), la Unión Nacional de Educadores de Escuelas Especiales (UNEES) y la Coordinadora Nacional de Educación Especial (CONADEE) manifestaron que es necesario «abrir un debate técnico y ciudadano respecto a las definiciones que debe tener el Estado para ayudar a los discapacitados a tener una educación de calidad y con igualdad de oportunidades».
En este sentido, las organizaciones llamaron a la Presidente Bachelet a quitar la suma urgencia del proyecto de Ley que Modifica el DFL 2 de 1998 sobre subvenciones y que «engañosamente se conoce sólo como un proyecto que incrementa la subvención de cinco discapacidades (auditiva, visual, multidéficit, disfasia y autismo)».
Es inminente la aprobación del proyecto en la Cámara de Diputados luego de ser vista por segunda vez por la Comisión de Educación.
Al respecto, las agrupaciones indicaron que sacar la suma urgencia permitiría abrir una discusión «que debiera culminar con la modificación de la iniciativa y aprobar sólo el incremento, sin necesidad de hacer lo mismo con otros puntos contenidos en el texto que están arbitrariamente ‘amarrados’ al beneficio y que, tal y como están planteados, afectarán la ayuda que el Estado otorga hoy a miles de niñas y niños discapacitados».
Lamentaron que el ministro de Educación, Martín Zilic, continúe con la estrategia de su antecesor, Sergio Bitar, justificando la urgencia por la necesidad de aprobar un aumento de la subvención «que nadie discute y que no necesita las nuevas conceptualizaciones contenidas en el proyecto».
Al respecto, precisaron que introducir conceptos como «Necesidades Educativas Permanentes y Transitorias», sin determinar cuáles serían aquellas, «es irresponsable», denunciaron. Agregaron: «Esto es aún más grave por cuanto el proyecto plantea esta nueva conceptualización para generar un mecanismo de fraccionamiento (disminución) de la actual subvención para algunas de las discapacidades», detallaron.
Denunciaron que el Proyecto de Ley «es una iniciativa legal mala y engañosa». Mala, «porque aún mantiene un sistema perverso de discriminación que hace que no todos los supuestos favorecidos obtengan el incremento y en la práctica se debe postular, existiendo cupos limitados de beneficiados». Engañosa, «porque quiere presentarse como un simple incremento, que además es insignificante, por cuanto afecta a menos de un 4% de la actual matrícula de las escuelas especiales».
Concluyeron: «Las organizaciones de padres, profesores especialistas, profesionales no docentes y sostenedores de Escuelas Especiales, estamos en alerta máxima frente a la inminente aprobación del polémico proyecto. Usaremos todos los medios que otorga el Estado democrático para manifestar nuestro rechazo a las políticas en educación que se hacen a espaldas de los más débiles dentro de los débiles: los miles de niñas y niños discapacitados del país».
Santiago de Chile, 12 de Mayo 2006
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