La encuestadora Eugenio Escuela estimó que Chávez goza del 78 por ciento de apoyo de la población y 57,4 por ciento de disposición del voto, mientras el 62,2 por ciento considera que la situación del país mejoró durante su mandato iniciado en 1999.
El Instituto Venezolano de Análisis de Datos le otorga al Presidente venezolano el 52,3 por ciento de la votación.
Según ambos sondeos ninguno de los candidatos opositores tiene posibilidades de triunfo, pues el mejor ubicado alcanza apenas el seis por ciento en una de las investigaciones.
Eugenio Escuela otorga 3,2 por ciento a Julio Borges, del partido Primer Justicia, tres por ciento al gobernador de Zulia, Manuel rosales, 1,8 por ciento al independiente Teodoro Petkoff y 0,5 por ciento para otros candidatos.
Análisis de Datos le da seis por ciento a Rosales, 4,6 por ciento a Borges y 1,9 a Petkoff.
La ventaja de Chávez se basa en una política de alto contenido social caracterizada por la puesta en marcha de programas gratuitos de salud y educación, alimentos subvencionados, planes de creación de empleos y lucha contra la pobreza.
Estos programas son financiados por la renta petrolera del país, quinto exportador mundial, y la proyección oficial de propiciar una mejor distribución de la riqueza en el país sudamericano, donde el nivel de pobreza alcanza al 50 por ciento de la población.
Frente a ello la oposición no ha logrado estructurar una alternativa atractiva para la población, ni existe un liderazgo con fuerza suficiente para enfrentar a Chávez.
En un intento por tratar de obstaculizar la casi segura reelección de Chávez, varios de los opositores han propuesto la selección de entre ellos de un candidato único para las elecciones que deben realizarse el próximo 3 de diciembre.
Caracas, 19 de junio 2006
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