Agradezco la posibilidad que se nos da de decir unas palabras en esta reunión tan representativa del mundo político y social.
Lo primero que yo quería plantear es que cuando se producen crisis y esas crisis se resuelven bien, son favorables a los pueblos. Da la impresión que en el país hay algunos atisbos muy serios de crisis. La movilización estudiantil no sólo es la crisis del sistema educacional, sino que es síntoma de una crisis mayor en nuestra sociedad la cual se debe tener en cuenta.
Creo que esa crisis se está dando entre otras cosas, por la lejanía que se está produciendo entre los que son representados y sus representantes. Se va acrecentando la percepción del pueblo de que quienes los representan no responden a sus grandes anhelos y esperanzas tantas veces burladas.
Nosotros como Partido Comunista, junto a otras fuerzas políticas y sociales, tomamos la determinación, no fácil para nosotros, de llamar a votar por Michelle Bachelet en la segunda vuelta, teniendo presente que la Presidenta asumía un compromiso público de hacer el máximo de esfuerzos por llevar a buen término algunas reformas fundamentales para nuestro país, para la democratización y para el avance también de las organizaciones sindicales y sociales.
No hemos perdido la esperanza, a pesar de todas las dificultades que se notan en el ambiente político, de la resistencia que pone la derecha y de algunas indecisiones de la Concertación, que estas reformas se lleven adelante. Esto es posible con esta convergencia y sobre todo con la movilización y la lucha.
Quiero saludar lo que dijo la Presidenta de la República, en una entrevista, donde ella reafirma estar abierta a la idea de llamar a un plebiscito, aunque este no sea vinculante, si es que no se dan las condiciones en el Parlamento para cambiar el sistema binominal.
Yo creo que el camino es ese, es decir, decidirse a enfrentar estos temas que son cruciales para el futuro del país, porque si no lográramos tener la mayoría que se necesita en el Parlamento, el lograr un plebiscito aunque no sea vinculante sería un triunfo para la sociedad chilena, para el propósito de todos quienes quieren democratizar el país porque estamos seguros que la gran mayoría de los chilenos está por cambiar este sistema electoral aberrante.
Lo mismo respecto de los otros puntos que ha planteado la CUT, nos parece que en el tema de la reforma previsional debe escucharse la opinión de los trabajadores y que en el proyecto definitivo que se envíe al Parlamento deben estar consideradas las cuestiones principales que plantean los trabajadores.
Aparece como impresentable que se siga privilegiando el sistema de las AFP y un sistema privado de previsión. Chile tiene todas las posibilidades de ofrecer alternativas a los trabajadores y que puedan optar libremente entre un sistema previsional privado que ha pervertido el sentido de la previsión y uno estatal que además garantizaría de mejor forma y con menor costo el resguardo de los aportes de los trabajadores. Es necesario también que la empresa privada entregue obligatoriamente un aporte al fondo solidario.
El tema de la educación está puesto por la fuera y decisión de la lucha estudiantil. El gobierno debe escuchar lo que dicen los estudiantes y los profesores, eso puede ser parte de nuevas movilizaciones y nosotros por cierto no le tememos a las movilizaciones, estamos con ellas y contribuiremos a ellas porque, tal como lo ha dicho el Presidente de la CUT, ellas son las que hacen mover el motor de la historia.
Hay otros temas que están pendientes de los 5 puntos sobre los que se comprometió la Presidenta.
Entre ellos, uno primordial, el tema de la negociación colectiva. No basta con los derechos político esenciales, los derechos sociales, sindicales, una inmensa falencia entre el poder omnímodo de las grandes empresas transnacionales y grupos nacionales.
Un tema que subyace en la crisis, es el tema económico, porque una de las distancias que está empezando a ver la ciudadanía con quienes los representan, es este hecho de que existen tantos recursos, tal vez este es el gobierno que ha tenido más recursos a la mano, y no se ve que prioritariamente se planteen soluciones a problemas acuciantes para muchos sectores, que durante largos años han estado escuchando promesas incumplidas del mismo tenor durante las batallas electorales.
Pensamos que este Parlamento social y político debe discutir estos temas. Abramos la posibilidad de discutir de estos temas que son cruciales en todo Chile.
Desde luego debemos terminar con esto que aparece como un candado, que realmente impide la participación popular. Cambiar esta antidemocracia que se produce por la vigencia del sistema electoral binominal.
Es muy importante el compromiso que se logre en esta reunión para seguir avanzando, ganando voluntades, para seguir luchando hasta conquistar el objetivo de abrir paso a la democracia y la participación real del pueblo.
Santiago de Chile, 18 de julio 2006
Crónica Digital , 0, 488, 3
