Tras reunirse en Washington con su par norteamericano, Donald Rumsfeld, Blanlot declaró que la candidatura del gobierno del presidente Hugo Chávez para ocupar un escaño en ese órgano de Naciones Unidas «no constituye una opción de unidad» para Chile en la región.
La propia titular había dado cuenta del pedido del secretario de Defensa norteamericano para que Chile votara a favor de Guatemala -el candidato de Estados Unidos-. Rumsfeld indicó que su gobierno no entendería que Santiago votara por Venezuela.
Las declaraciones de Blanlot dieron lugar a una enérgica reacción de la presidenta Michelle Bachelet en el sentido de que su gobierno no acepta presiones de Washington ni de ningún otro Estado en temas de política exterior.
La mandataria reiteró que la decisión sobre un eventual apoyo a la candidatura venezolana será tomada por ella en el momento que estime oportuno teniendo en cuenta la conveniencia nacional y el interés de los países de la región.
Miembros del Partido por la Democracia (PPD), agrupación en la cual milita Blanlot, se encuentran preocupados por la tensión generada en La Moneda y criticaron que la Ministra diera opiniones sobre temas que no correspondían a esa cartera.
Patricio Hales, presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, lamentó las declaraciones y señaló que «hubiera sido mejor que todos hubiésemos sintonizados con la Presidenta Bachelet para apoyarla en el esfuerzo que hace por América Latina».
«Lamento las declaraciones y las explicaciones porque la Presidenta ha sido muy clara. No creo conveniente que un ministro de Defensa diga por la prensa que Venezuela no es para nosotros una opción de unidad», apuntó el diputado del PPD.
El parlamentario admitió que Blanlot actuó de hecho «como vocera de las presiones foráneas». El oficio de la expresión pública en política requiere de entrenamiento, puntualizó el legislador en respuesta a una pregunta periodística.
Por su parte, el senador Roberto Muñoz Barra, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de ese órgano legislativo, comentó que «nos estamos metiendo autogoles» y exhortó a La Moneda a decidir de una vez sobre el tema de Venezuela para evitar más confusiones.
Mientras, dos influyentes congresistas de la Democracia Cristiana (DC) -principal partido de gobierno- rompieron con la directiva de esa agrupación y expresaron su respaldo a la candidatura de Venezuela para ocupar la vacante de Argentina en el Consejo de Seguridad.
«Me parece que la posibilidad de Venezuela hay que mirarla con ojos positivos, no con sentido demoníaco como lo han visto algunos», afirmó el senador Jorge Pizarro, quien vaticinó que «Chile va a terminar votando a la larga por ese país».
«Chile va a terminar votando a la larga por Venezuela porque va a existir un sentimiento mayoritario de la región por respaldarlo y porque, además, es lo adecuado en nuestro entorno regional más cercano», puntualizó.
Para el senador DC la discusión generada en torno al tema es artificial y la mandataria debería decidir cuanto antes sobre el tema para evitar «fracturas dentro de la coalición gobernante» y porque el debate trae «ruidos innecesarios en la relación con nuestros vecinos».
Por su parte, al diputado Gabriel Ascencio también le parecieron inadecuadas las declaraciones de la ministra de Defensa y señaló que Bachelet debiera decidir a la brevedad el voto para el Consejo de Seguridad. Además criticó las presiones de Estados Unidos.
Santiago de Chile, 28 de Julio 2006
Crónica Digital/PL
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