Al participar en el congreso «Jóvenes y Política», organizado por la Universidad de Los Andes, la ministra Provoste dijo que «nunca he visto a ninguna autoridad del mundo eclesiástico golpeando la puerta de un ciudadano».
Goic, también Obispo de Rancagua, consideró que las declaraciones de la ministra son «profundamente lamentables». Explicó: «Creo que la señora ministra ignora la acción que desarrolla cada párroco que conoce a su gente y los obispos en las visitas pastorales que hacemos a cada una de las parroquias de nuestra jurisdicción eclesiástica. Tenemos un permanente contacto con nuestra gente».
«Sin petulancia, creo que pocos conocen tanto la realidad de la gente como los párrocos de Chile y los obispos en su respectiva jurisdicción que les corresponde animar como pastor», agregó el prelado.
Al mismo tiempo, la Unión Demócrata Independiente (UDI) manifestó su apoyo a la Iglesia y consideró vergonzosas las declaraciones de la Ministra.
«Es lamentable que personas que sólo recorren las poblaciones cuando hay que hacer casa a casa en las elecciones, vengan a criticar a instituciones que están tan cerca de la comunidad y que cumplen una labor social tan importante en el país como es la Iglesia Católica y otros cultos religiosos. Nos parece que es una vergüenza que una ministra emprenda una campaña contra la Iglesia, señalando una cosa de la gravedad como la que ella ha señalado», afirmó el jefe de la bancada gremialista, Marcelo Forni.
Santiago de Chile, 9 de agosto 2006
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