Lo que nosotros queremos es que la Empresa Nacional de Petróleo (ENAP) con la empresa respectiva en Venezuela (PDVSA) vean en qué pueden trabajar juntas, indicó tras su regreso de la Cumbre Unión Europea-América Latina y el Caribe, recién celebrada en Viena.
Dijo que el tema fue tratado ampliamente por los presidentes Hugo Chávez y Michelle Bachelet durante un encuentro que ambos sostuvieron el jueves en la capital austriaca en el marco del magno evento.
Destacó que uno de los aspectos a explorar es el ofrecimiento venezolano para que la ENAP opere en algunas zonas de Venezuela donde existen grandes reservas comprobadas de petróleo a los efectos de hacer prospecciones de nuevos yacimientos.
Según el canciller, en la reunión entre la mandataria chilena y su homólogo venezolano se trataron temas «bien específicos».
Bachelet ha insistido en reiteradas oportunidades, y también durante su gira europea, en la legitimidad de los gobiernos de izquierda y progresistas elegidos democráticamente en el cono sur latinoamericano y, en particular, el de Venezuela.
«Nosotros le sacamos la ideología a la discusión», dijo Foxley tras subrayar que «Chile tiene una manera de hacer las cosas que puede ser distinta a como lo hacen otros países», en aparente alusión a las campañas de Estados Unidos contra Bolivia.
En cuanto a Bolivia, insistió en el interés de Chile de mantener una agenda «abierta y sin exclusiones» en términos de temas, «pero también sin imposiciones».
«Nadie nos va a imponer algo que no sea razonable y que no defienda bien los intereses de Chile», advirtió el Canciller, que insistió en que siempre ha sido una aspiración chilena reanudar las relaciones diplomáticas con Bolivia.
«No hay ninguna razón para que dos países, que son vecinos, que debieran tener las mejores relaciones, tengan esta permanente tensión. Así es que si las conversaciones llevan a restablecer relaciones diplomáticas por supuesto que lo vamos a hacer», dijo Foxley.
Respecto de la histórica demanda boliviana de salida al mar, el canciller valoró que el Presidente Evo Morales señalara «por primera vez y en forma muy clara a Bachelet, que ellos no ponen ninguna exigencia en términos de colocar el tema marítimo al centro».
Según el ministro, «la clave es terminar con las desconfianzas, sentir que de verdad queremos entendernos, en términos muy racionales, a través de las cancillerías, y sin crear demasiadas expectativas, que otras veces han operado en contra de llegar a algún acuerdo».
Santiago de Chile, 15 de mayo 2006
Crónica Digital/PL , 0, 39, 3