El ministro de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley, dijo la víspera que «cualquier proposición que haga cualquier país de la región la vamos a tomar en consideración muy seriamente», abriendo las puertas a un acuerdo para destrabar el conflicto.
Foxley, que ha sido objeto aquí de fuertes críticas por su intransigente postura contra la aspiración venezolana, señaló que «de lo que se trata es que haya una sola voz que nos representa a todos, ese es el ejercicio».
«Lo que nosotros vamos a hacer durante el día de mañana es tener un diálogo con todos los países del grupo latinoamericano y vamos a respaldar y apoyar aquella candidatura real», agregó el secretario de Estado.
Foxley descartó que esta nueva candidatura sea cuestionada en el gobierno por el hecho de venir del presidente Hugo Chávez. «No es ninguna complicación para nosotros que Venezuela proponga tal o cual país, tal como nosotros podríamos hacerlo», precisó.
En términos semejantes se pronunció el canciller peruano José Antonio García Belaunde, de visita en Santiago, luego que el presidente Evo Morales dijo ayer haber recibido un ofrecimiento en tal sentido de su par venezolano Hugo Chávez.
Consultado por medios de prensa, García Belaunde señaló escuetamente que su país está dispuesto a apoyar una candidatura de consenso. En este sentido, «obviamente entregaremos el apoyo a Bolivia si ese país levanta la candidatura», apuntó.
El retiro de la candidatura venezolana debiera quedar formalizado hoy antes de iniciarse una nueva ronda de votaciones en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde ninguno de los actuales aspirantes han logrado el mínimo de votos requeridos.
Según Morales, el mandatario venezolano le ofreció que Bolivia se convierta en el candidato de consenso para destrabar la reñida disputa con Guatemala, luego de 35 rondas de votaciones en el máximo organismo mundial.
Aunque Caracas aún no ha entregado una versión oficial, el canciller chileno declaró que «estamos muy satisfechos de que finalmente se ha comenzado a conversar en serio para encontrar una candidatura de consenso».
Según versiones destacadas aquí por la prensa local, Morales afirmó que la opción boliviana va en serio.
«Somos candidatos del Consejo de Seguridad y ojalá podamos conseguir consenso. Seguramente otros embajadores deberán ser movilizados en las Naciones Unidas», sostuvo el mandatario en una concentración realizada en la ciudad de El Alto.
En Caracas no han confirmado la información, pero en declaraciones oficiales las autoridades ya evaluaban el escenario de abrirse a una solución de consenso, aunque condicionada a una retirada de Guatemala y a que Estados Unidos no interfiera en la solución.
«Solo podríamos considerar esa opción si Guatemala renuncia, si Estados Unidos cesa en su grosero chantaje a otros gobiernos del mundo y si se abre un proceso transparente de conversaciones», dijo Maduro al canal estatal Venezolana de Televisión.
Maduro dijo que su país podría aceptar que se busque una alternativa de consenso a pesar de que cuenta «con el apoyo de casi el 80 por ciento de los países latinoamericanos y del Caribe».
«Siempre estamos dispuestos a conversar, pero si no se dan esas condiciones mantendremos nuestra candidatura», expresó.
Medios de prensa locales consideran a Bolivia un buen candidato teniendo en cuenta sus buenas relaciones con todos los países de la región, incluyendo Chile y Perú, que habían optado por la abstención en medio de una fuerte polarización del tema.
Santiago de Chile, 25 de octubre 2006
Crónica Digital/PL , 0, 79, 3