El presidente de la Izquierda Cristiana, Victor Osorio, entregó la solidaridad con los habitantes de la popular población La Victoria, por el sensible fallecimiento del sacerdote Pierre Dubois.
«Para la IC la partida del padre Pierre es irreparable. Él fue un gran luchador por los derechos humanos de los chilenos y chilenas y, en especial de sus hermanos pobladores durante la dictadura de Augusto Pinochet», señaló Osorio.
Recordó que el sacerdote «siempre apoyó la organización de los pobladores y logró plasmar en ellos la opción por los pobres y aplicó los acuerdos de la iglesia de Puebla y Medellin».
«Pierre fue uno más entre los pobladores, un organizador, una voz de esperanza en medio de la tragedia marcada por la persecución, asesinato y tortura, de tantos», apuntó el periodista.
Cabe recordar que uno de los golpes que más conmovió a Pierre Dubois fue encontrar a su amigo y compañero de labores, el padre André Jarlan, muerto por un impacto de bala en su cabeza, mientras leía la Biblia, el 4 de septiembre de 1984, en el transcurso de una protesta.
Jarlan muere, cuando carabineros ingresa a la población La Victoria, como parte de un despliegue que buscaba dispersar las manifestaciones que se realizaban en contra de Pinochet.
«Era el tiempo de las balas sin nombre y destino, que atravesaban paredes humildes de madera, para encontrarse, con mujeres, niños», remembró Víctor Osorio.
Agregó: «Pero el padre Pierre no se desalentó. Asumió la partida de su hermano como una señal de que pronto vendría la paz a Chile».
Tras el atentado contra Pinochet en septiembre de 1986, la represión de los aparatos del Estado se agudizó y Dubois fue detenido y expulsado del país.
«Hoy todos los hombres y mujeres progresistas de Chile y del mundo estamos de luto. Las organizaciones sociales han perdido a uno de los suyos. Su tarea no será inconclusa. Su legado hoy lo estamos asumiendo en cada lugar donde se violen los derechos humanos», finalizó Osorio.
Santiago de Chile, 28 de septiembre 2012
Crónica Digital
