La reunión tuvo lugar en la sede de la UE poco después de la llegada del líder boliviano procedente de Madrid, donde se entrevistó con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero y el Rey Juan Carlos.
Antes de que el encuentro se realizara, Solana y Morales comparecieron brevemente ante los periodistas y el visitante dijo sentir «mucho respeto para conversar» con las autoridades europeas y «sentar ciertas bases de su futuro gobierno».
A una pregunta acerca de una posible preferencia de su gobierno por Europa respecto de Estados Unidos, Morales respondió que «el movimiento indígena, nuestro movimiento político, es parte de la cultura del diálogo y vamos a dialogar con todos».
Agregó que hacía tres días se había reunido con el embajador de Washington en Bolivia, aunque no precisó los temas tratados.
Solana, quien calificó de positiva la reunión, admitió que Morales es «un presidente que ha ganado por una mayoría abrumadora y con el que hay que contar», y lo definió como un «hombre que surge del pueblo, con una voluntad de hacer cosas buenas para su gente».
«Esperemos que las pueda hacer, y en las cosas que pueda hacer buenas para su gente y que sean dentro de las normas, la Unión Europea le ayudará», aseguró.
Al término de su estancia en Bruselas, el presidente electo boliviano visitará París, además de Sudáfrica, China y Brasil. Su primera salida al exterior fue a La Habana, donde fue recibido por elpresidente Fidel Castro y, posteriormente, Caracas, donde se reunió con el presidente Hugo Chávez.
Bruselas, 5 enero 2006
Prensa Latina , 0, 47, 2