En declaraciones exclusivas a Crónica Digital, el dignatario eclesiástico sostuvo que los cristianos, junto a toda persona de buena voluntad, están llamados a ser promotores de la vida y de la paz y, en este sentido, no se puede justificar de ninguna manera acciones militares unilaterales e irresponsables repudiadas en todo el mundo.
El 14 de marzo la Red de redes en Defensa de la Humanidad publicó el llamamiento Cese la Hipocresía en el tema de los Derechos Dumanos, firmada por 471 personalidades del mundo, y que hoy han adherido más de 6 mil activistas por la paz y personalidades políticas y culturales de los cinco continentes.
El pastor chileno, dijo que no es posible aplaudir a quién representa y defiende actos reñidos con una recta ética cristiana, es decir, con quién justifica la guerra y la opresión. Y ante hechos de esta naturaleza evidente, es claro que el gobierno de los Estado Unidos es promotor de una cultura de la muerte y no entender ni asimilar que sólo la justicia trae la Paz.
En tanto el sacerdote jesuita y fundador del movimiento contra la Tortura Sebastián Acevedo, José Aldunate, acusó a la administración Bush de usa y abusar de los contenidos cristianos para justificar sus acciones que alteran la paz y convivencia a nivel planetario.
Ante esto no se puede guardar silencio y, en conciencia, se debe levantar la voz sin temor y denunciar esta operación que tantos dividendos les otorga a la Casa Blanca, apuntó a éste medio, el reconocido luchador por los derechos humanos durante la dictadura de Pinochet (1973-90).
Sostuvo que para un correcto discernimiento basta ir a lo que dice el Concilio Vaticano. La paz -dijo- ha de nacer de la mutua confianza de los pueblos y no debe ser impuesta a las naciones por el terror de las armas. A la luz de esta reflexión mucho nos pueden decir hoy los pueblos de Afganistán e Irak
Por último, el teólogo y editor de la Revista Reflexión y Liberación, Jaime Escobar, aseveró que sectores cristianos progresistas expresamos nuestro rechazo a lo que representa hoy en el mundo la Casa Blanca. Pero ese rechazo se expresa por el contenido ético y moral de las acciones que ha realizado en contra de la vida humana.
El líder laico chileno, recordó que gracias a la Escuela de las Américas administrada por el ejército de Estados Unidos, algunos de sus graduados retornaron a sus países para cometer los más grandes crímenes de guerra del Continente en los tiempos de las dictaduras militares de triste memoria.
Escobar, subrayó queallí están los cientos de miles de torturados, asesinados y desaparecidos a manos del personal militar entrenado en esa perversa Escuela del terror. Y que hoy recordamos el martirio de Monseñor Oscar Romero de El Salvador, no podemos dejar de pensar en el robo de niños a los prisioneros en Argentina, las crueldades sistemáticas y experimentales de las dictaduras en Brasil, el brutal crimen del padre Luis Espinal en Bolivia, como el de nuestro Miguel Woodward en Valparaíso y una larga lista martirial.
Con la tranquilidad de Espíritu de los cristianos y manantes de la cultura de la vida, le preguntamos al presidente George W. Bush que es miembro de la iglesia Metodista, si: ¿ha pedido perdón por estas barbaridades? Estamos seguros que no, más bien ha seguido con este terror que es la tortura y la muerte. Hay que informarse y mirar hacia Abu Ghraib o Guantánamo o, lo que ocurrió en las cárceles secretas de la CIA esparcidas por Europa después de la invasión al territorio iraquí, recordó el activista por los derechos políticos y sociales.
La adhesión de las eminentes autoridades de las iglesias chilenas, se debe al llamado realizado hace algunos días por emblemático líder de izquierda y premio nacional de Literatura (2202) Volodia Teiltelboim, el cual llamó a poner fin a los centros de detención ilegales de Estados Unidos y a sus violaciones y sistemáticas y masivas de los derechos humanos.
Teiltelboim, es uno de los 471 intelectuales del mundo que a través de una carta firmada el 14 de marzo pasado, enviaron a Naciones Unidas, para que exija el cierre inmediato de los centros de detención arbitraria creados por los Estados Unidos y el cese de todas estas flagrantes violaciones de la dignidad humana.
Por: Iván Gutiérrez Lozano
Santiago de Chile, 24 de marzo 2006
Crónica Digital
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