Valoramos lo hecho por Bachelet en términos de gestos, pero creemos que estos gestos son de todas maneras débiles, creemos que hacen falta hechos concretos que nos puedan abrir verdaderamente a que Chile viva en democracia plena, indicó ayer la miembro del Comité Central del PC Claudia Pascuala.
La dirigente del Partido Comunista (PC) indicó que ese es uno de los temas pendientes, quizás el más trascendente, para terminar con la discriminación y las exclusiones de importantes sectores de la sociedad chilena.
El denominado sistema electoral binominal fue impuesto por el ex dictador Augusto Pinochet en 1989 antes de entregar el gobierno a fin de asegurar el dominio de los sectores políticos que lo apoyaron durante los 17 años de régimen militar.
La normativa permite a la extrema derecha opositora, con el 35 por ciento de los votos, disponer de la mitad de los cupos de ambas cámaras del Congreso, mientras que partidos y organizaciones de izquierda y progresistas no tienen acceso.
Pascual, consideró positivo el peso que le ha dado el gobierno al cambio del sistema electoral y a los temas de seguridad social, pero se requiere -dijo- más que buena voluntad.
Apuntó que, si bien existe de parte del Ejecutivo y los parlamentarios que integran la coalición gobernante consenso en la necesidad de llevar a cabo la reforma previsional, se ha dejado fuera de la Comisión que estudia las propuestas al actor principal: los trabajadores.
«Hay que hacer hincapié y énfasis en los pilares que han estado ausentes del sistema de pensiones: los empleadores (empresarios) y el Estado, para el financiamiento de pensiones dignas», afirmó.
El sistema de pensiones, basado en seis grandes empresas privadas que manejan más de 70 mil millones de dólares del aporte de los trabajadores, es otro de los rezagos de la dictadura militar que Bachelet se comprometió a cambiar.
En cuanto a los reajustes del 10 por ciento de las pensiones mínimas y asistenciales, propuestos por la mandataria al Congreso, las dirigentes comunistas consideraron que representa un buen paso, pero criticaron que esté asociado al aumento de los impuestos.
El proyecto de ley presentado la semana pasada al Parlamento está condicionado a mantener el Impuesto del Valor Agregado (IVA) por sobre el 19 por ciento, un tope que debía ser rebajado a 18 en enero del 2007 en virtud de un compromiso del anterior gobierno.
Pascual sostuvo que «nos parece que la mantención del IVA nos da cuenta de la realidad económica que tenemos hoy día como país, con un superávit fiscal y no se recurre a esos dineros, y se vuelve a aumentar la carga impositiva de todos los chilenos».
«Es un avance que se puedan aumentar las pensiones, creemos que hoy día se pueden incrementar en la medida de las necesidades de pensionados y jubilados, pero no sobre la base de subir también los impuestos», sostuvo.
El PC, que en los comicios parlamentarios obtuvo más de cinco por ciento de los votos, apoyó la candidatura presidencial de Bachelet en segunda vuelta luego que ésta se comprometió a cambiar el sistema electoral y reformar el sistema de pensiones, entre otras medidas.
Santiago de Chile, 12 de abril 2006
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