El acuerdo político fue presentado al país por presidente de la CUT, Arturo Martínez, en presencia de los máximos dirigentes de los partidos de la coalición de gobierno y de la izquierda extraparlamentaria.
En la reunión con la prensa estuvieron presentes los dirigentes oficialistas, Camilo Escalona, presidente del Partido Socialista, Sergio Bitar, presidente del Partido Por la Democracia, el Secretario General del Partido Radical Social Demócrata, Ernesto Velasco y el Vicepresidente de la Democracia Cristiana, Eduardo Abedrapo.
Asimismo, concurrieron el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier y el Secretario General de la Izquierda Cristiana, Carlos Donoso.
En el encuentro, Martínez dijo que las desigualdades sociales son consecuencia de los desequilibrios de representación política existente en el Parlamento, que mantiene como guardianes de los poderosos a la derecha política sobredimensionada gracias al sistema electoral vigente»
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El cambio del sistema binominal, aprobado en 1988 por el ex dictador Augusto Pinochet para asegurar el poder político de la derecha, es una de las 36 medidas propuestas por la presidenta Michelle Bachelet.
La normativa vigente permite que ambas coaliciones -de gobierno y oposición- se repartan virtualmente a partes iguales los escaños parlamentarios, mientras excluyen a los partidos de izquierda, a representantes gremiales y de organizaciones sociales de base.
«Hoy nos enfrentamos a la posibilidad de cambiar las reglas electorales y modificar la Constitución aprobada de manera fraudulenta en 1980, en medio del terror y la persecución sin garantías democráticas», apuntó Martínez
El máximo líder del movimiento sindical chileno, enfatizó que las fuerzas sociales y políticas debemos dar un fuerte impulso a la democratización del país, rompiendo con los enclaves estructurales del modelo expresados en el actual sistema electoral binominal.».
ESCALONA: SISTEMA BINOMINAL ES LA PATA COJA
Escalona calificó al sistema electoral como «la pata coja» de la democracia chilena y se pronunció por la unidad de todas las fuerzas que luchan por una sociedad justa, sin discriminaciones ni excluidos.
Destacó que la reforma electoral no pasa por un tema de costos, sino que de voluntad política. En ese sentido, reiteró que la Concertación está dispuesta a financiar un Parlamento con 150 diputados con el mismo costo con que financia a los 120 diputados actuales.
El dirigente socialista puso de relieve que la derecha, especialmente la UDI, gozan de un bono electoral gracias al sistema binominal, que les da sobre-representación en el Parlamento, siendo ésta una de las principales razones para rechazar el cambio de sistema.
El también senador, señaló que en democracia tenemos que concursar todos en igualdad de condiciones, sin ningún tipo de trampas ni de bonos, asumiendo las reglas democráticas y esas reglas indican que todas las fuerzas que tienen arraigo popular deben estar representadas en el Congreso Nacional.
MOVILIZACIÓN SOCIAL: UNO DE LOS CAMINOS
Escalona destacó el hecho de que Renovación Nacional se abra a la posibilidad de estudiar una reforma electoral. Hemos leído en la prensa que RN ha formado una comisión. Nos parece que frente a la negativa inicial, es un síntoma, una señal que no nos ha pasado inadvertida.
Sabemos que este es un camino difícil, expresó Escalona, pero manifestó su confianza en que la sociedad chilena sabrá arribar a una solución que permita poner fin a la exclusión de un sector importante de la población.
De no ser así, el militante socialista mostró su confianza en que la CUT pueda liderar potentes movilizaciones sociales que expresen el sentir de la gente que busca terminar con los enclaves que dejo la dictadura.
Por último recordó que el PS ha mantenido durante los últimos 15 años una consecuencia para terminar con el sistema binominal.
TEILLIER ASUMIR LOS CAMBIOS
Teillier destacó la iniciativa de la CUT de convocar a todas las fuerzas democráticas del país, agradeció la presencia de los líderes partidistas de la coalición de gobierno y se felicitó por la coincidencia de fuerzas tan diversas en un objetivo tan importante.
«Con esta convergencia queda claro que los únicos que se oponen en el país a la transformación del sistema electoral son un sector de la derecha. Ojalá que comprendan que este es un reclamo de la inmensa mayoría de la sociedad», apuntó.
El dirigente comunista insistió en la necesidad de que el nuevo sistema sea incluyente, proporcional, que no discrimine a quienes no tengan aprobada la enseñanza media -una alta cifra de chilenos- y que de mayores posibilidades de participación a los jóvenes.
Al ser consultado sobre los desacuerdos que su colectividad tiene con la propuesta gubernamental, el carismático militante comunista, sostuvo que con más del siete por ciento de la votación, la izquierda extraparlamentaria podría tener un dos por ciento de representación parlamentaria.
El dirigente recordó que en las últimas elecciones parlamentarias, el Pacto Juntos Podemos Más obtuvo el 7,4 por ciento de la votación y «eso es lo que correspondería que tuviéramos a nivel de representación parlamentaria, es decir entre siete y 10 diputados». En lo inmediato, con la propuesta gubernamental quedarían representados en el Parlamento de igual forma la Concertación y la derecha.
La propuesta de la Comisión Boeninger creada por Bachelet incluye aumentar el número de diputados de 120 a 150 y de senadores, de 38 a 48.
Teillier, apuntó que en términos de proporcionalidad política, la propuesta parte de una redefinición de los actuales distritos, en los que se debería elegir entre 2 y 8 diputados según el número de habitantes, es un avance respecto de la actual situación de bloqueo y exclusión de una tercera fuerza política de carácter nacional en el Parlamento.
Sin embargo, dijo que una simulación de lo que ocurriría utilizando el sistema propuesto por la Comisión Boeninger, con los datos de las elecciones parlamentarias de 2005, concluye que el Juntos Podemos Más, que alcanzó un 7,4 por ciento de los votos, obtendría sólo 3 Diputados, es decir solo un 2 por ciento de los parlamentarios, en circunstancias que debiera tener al menos 9.
Persiste entonces una concepción de exclusión que opera en favor de los bloques actuales. La concertación y la derecha quedan muy sobre representados, finalizó Teillier.
BITAR: DEBEMOS TENER UN SISTEMA INCLUSIVO Y NO EXCLUYENTE
En tanto, el presidente del PPD, Sergio Bitar, subrayó que hoy estamos frente a un tema de Estado, donde se debe tener un sistema democrático inclusivo y no excluyente.
Bitar, saludó el esfuerzo de la CUT de estar uniendo a todos los sectores democráticos del país, para poner fin al sistema binominal no sólo está poniendo en el centro el tema de los derechos de los trabajadores, sino también reforzar la democracia.
Sobre las objeciones de la derecha a cambiar el sistema electoral, el dirigente señaló que no es un tema de dinero:le hemos dicho que el cambio al sistema electoral se puede hacer con la misma plata, pero se mostró confiado que ciertos sectores de la derecha y que tienen una visión más inteligente del futuro puedan dar este paso, finalizó.
El sistema binominal fue impuesto por Pinochet antes de entregar el gobierno en 1990, con el propósito de extender a perpetuidad su legado una vez desapareciera del escenario político nacional.
El mecanismo electoral, eufemísticamente llamado por la ultra derecha democracia protegida, permite a ese sector -con apenas un 35 por ciento de votos- compartir a partes iguales el poder político con la coalición gobernante, a expensas de la exclusión de la izquierda.
Santiago de Chile, 21 de junio 2006
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